La oferta de vehículos comerciales ligeros y furgonetas a la venta se disparó un 96 por ciento en 2008 como consecuencia de la crisis económica que está haciendo mella especialmente en el colectivo de autónomos, según un estudio elaborado por AutoScout24, un servicio alemán on-line de compra-venta de vehículos. El informe, que asegura haber movido cerca del 40 por ciento de los vehículos de segunda mano que se comercializaron en España en 2008, explica que la coyuntura actual, que ha llevado a la pérdida de casi 140.000 empleos autónomos en los últimos doce meses, está obligando a este colectivo a deshacerse de los que, hasta ahora, eran sus vehículos de trabajo.
De esta forma, los trabajadores por cuenta propia están recurriendo al mercado de segunda mano con el objetivo de vender un vehículo ya innecesario, o bien conseguir dinero rápido ahora que el acceso a la financiación representa el principal problema para la supervivencia de sus negocios. De hecho, más de 300.000 autónomos acudieron entre el 1 de enero y el 15 de febrero a bancos y cajas para solicitar líneas ICO y sólo 1.100 pudieron acceder a ellas, según la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos .
El estudio muestra, a su vez, que los trabajadores por cuenta propia que aún siguen en activo tienden a retener cada vez más tiempo su “vehículo de trabajo”, tratando de estirar al máximo su vida útil para recortar gastos. En 2009, la antigüedad media de dichos vehículos aumentó en siete meses, hasta situarse en más de cinco años, con un kilometraje de más de 96.400 kilómetros, lo que supone un recorrido medio anual de 19.200 kilómetros. Este envejecimiento de la flota se traduce en un descenso de su precio, hasta el punto de que en el último año éste cayó un 15,6 por ciento.