La crisis económica comienza a tener sus efectos en los puestos de trabajo del sector del transporte y la logística. En las últimas semanas son varias las empresas que han anunciado expedientes de empleo. En el Reino Unido, DHL ha despedido a 350 empleados que trabajaban en el centro de distribución de Doncaster para el distribuidor de muebles MFI. La razón es la retirada de su cliente, y aunque el operador logístico busca un nuevo ocupante para la plataforma, la empresa teme que deba cerrarla definitivamente en 2009. Por su parte, la competidora Wincanton licenciará a 188 trabajadores de los centros de Rochdale y Swindon.
De nuevo, se trata de una retirada: en este caso de la cadena Woolworth’s, que cerrará las tiendas aprovisionadas por aquellos almacenes. Asimismo, Wincanton despedirá a 900 trabajadores más en 2009, una vez que se fusione su división de logística de frío con el operador Culina (los centros de Gloucester y Trafford Park cerrarán sus puertas). La holandesa Vos Logistics despedirá a 350 trabajadores en Holanda, Polonia, Hungría y Francia. El operador, que desde octubre ha sufrido descensos de actividad de hasta el 30 por ciento en algunas especialidades, también venderá parte de su flota de vehículos.
En Francia, la asociación de transporte por carretera FNTR reporta que en los primeros 11 meses de 2008 han ido a la quiebra 2.055 empresas de transporte, lo que supone un aumento del 97 por ciento con respecto al mismo periodo de 2007. En las empresas de más de 50 trabajadores el aumento de quiebras asciende al 278 por ciento. En Alemania, el 30 por ciento de los operadores ha perdido clientes, y el 70 por ciento ha reducido ingresos y volumen.