El salón de la construcción SMOPYC dirige la vista al exterior y supera un año complicado.
Lejos los tiempos en que el mercado español matriculaba todos los años media docena de miles de vehículos rígidos de obra por la fuerte actividad del sector de la construcción, los organizadores del Salón Internacional de Maquinaria para Obra Pública y Construcción (SMOPYC), han dirigido su promoción hacia el frente internacional
Es de alabar el esfuerzo que, en la presente situación de la economía han hecho los fabricantes de maquinaria y vehículos para obra acudiendo a SMOPYC, el salón dedicado al sector de la construcción que se ha celebrado del 5 al 9 de este mes en Zaragoza. Si se miran los datos de matriculación de rígidos de obra durante el primer trimestre publicados por la patronal Aniacam, sorprende gratamente que dicha matriculación haya experimentado un crecimiento del 15,6 por ciento con respecto al mismo período de 2010, pero esa primera y favorable impresión se diluye en el éter cuando se ve que en ese período sólo se han matriculado 207 de tales vehículos.
Extrapolando linealmente a un año, estaríamos hablando de 828 vehículos, una birria frente a los 6.000 que se llegaron a registrar en nuestro mercado en los momentos de plenitud de la burbuja inmobiliaria y las inversiones públicas en infraestructuras.
La propia organización, consciente de las dificultades del sector español de la construcción, dirigió su promoción al frente internacional. Haciendo un repaso de los vehículos expuestos en el salón, MAN acudía con cinco camiones: una tractora TGX 18.480 BLS EfficientLine con cabina grande, motor D26 y cambio TipMatic; un rígido de cuatro ejes TGS 32.360 8X4 con hormigonera de 9 metros cúbicos; un tres ejes TGS 35.440 con volquete Meiller de 17 metros cúbicos y dotado del sistema HydroDrive de tracción hidróstatica; un TGL 12.250 de dos ejes con volquete trilateral de 4,7 metros cúbicos; y el TGS 18.480 4X4 con el que la portuguesa Elisabete Jacinto consiguió el segundo puesto en la reciente Africa EcoRace.
En el espacio ocupado por Mercedes- Benz, la estrella era el Zetros, un vehículo todo terreno que era la primera vez que visitaba una feria española. Se trata de un camión pesado que se vende sólo en versiones 4X4 y 6X6 y que tiene su cabina en posición normal; esto es, se trata de un camión con morro, configuración muy añorada por los camioneros más veteranos. Su motor de 6 cilindros en línea tiene una potencia de 326 caballos. Completaban la oferta de Daimler Trucks, diferentes modelos de las furgonetas Vito y Sprinter, con sus variantes de tracción 4MATIC, el Clase G Professional, algunas unidades de las gamas Actros y Atego, y un Unimog preparado para circular por vía férrea.
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