Tras un amago de recuperación en el primer semestre, el mercado se desplomó en la segunda mitad, por lo que sigue en la UVI y se agudiza el envejecimiento del parque.
El mercado español de remolques y semirremolques creció un 10,5 por ciento en 2010 sobre el bajísimo nivel del año anterior, por lo que sigue sin levantar cabeza y el envejecimiento del parque se agudiza. La quinta parte de los vehículos se sitúa por encima de los 20 años y la producción está por debajo de un tercio de la capacidad instalada
Si 2009 fue malo, 2010 no ha sido mucho mejor, cerrándose este último ejercicio con 5.452 remolques y semirremolques de más de 12 toneladas matriculados, lo que supone un 10,5 por ciento de avance pero sobre el bajísimo nivel a que se había llegado un año antes, según los datos de la Asociación Española de Fabricantes de Remolques y Semirremolques, Cisternas y Vehículos Análogos (Asfares), cuyos afiliados generaron el 74,7 por ciento de esa matriculación.
“A mitad del año, las perspectivas eran acabar 2010 con una suave pero constante tendencia a la recuperación, pero el segundo semestre devolvió las cifras al nivel de 2009, teniendo que ver cómo continuaban los problemas de financiación, desconfianza, descenso de la demanda de transporte y fuerte merma de la inversión en obra pública”, comenta Julio Viartola, secretario general de Asfares. La evolución por sectores ha sido dispar.
Así, los vehículos de lonas, que representaron un 45,2 por ciento de la matriculación en 2010, crecieron un 18,7 por ciento y también lo hicieron los furgones, un 62,2 por ciento, aunque este tipo de vehículo tiene una presencia muy reducida en el mercado. Descendieron las plataformas (5,2 por ciento) y las cisternas (4,5 por ciento). Preguntado sobre si se ha dado en el último trimestre del año un tirón en la demanda de remolques y semirremolques similar al que han experimentado las tractoras, Viartola admite que en el último trimestre del año hubo unas 500 ó 600 tractoras matriculadas por encima de lo previsible, pero no cree que se deba al vencimiento de normativa alguna de tipo técnico.
Sin embargo, el secretario general de Asfares, que reconoce que la demanda de remolques y semirremolques es muy estacional, no ha detectado un incremento notable de su matriculación en sectores como el de productos perecederos durante ese último trimestre de 2010, en paralelo con el aumento de matriculación de las tractoras. “La verdad es que a los fabricantes de frigoríficos les ha ido muy mal en ese período, con caídas notables en algunas marcas”, subraya Viartola, quien se lamenta de que el nivel de producción en 2010 sólo representa un tercio de la capacidad instalada.
Por lo que concierne a 2011, Viartola cree que en el primer semestre se producirá una evolución similar a la del mismo período de 2010, con un 10 por ciento de aumento de las matriculaciones, y desea fervientemente que en el segundo semestre suban las cisternas y frigoríficos. Desde la patronal Asfares resaltan que el envejecimiento del parque de remolques y semirremolques se hace insostenible. Durante el pasado año se renovaron menos del 3 por ciento de los vehículos en circulación, dándose de baja sólo un 1 por ciento. Desde el inicio de la crisis, la edad media ha subido dos años y hoy más del 15 por ciento del parque supera los 15 años, con más de 15.000 vehículos por encima de los 20 años.
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