La compañía, del grupo Nogar, solicita concesión para construir un almacén destinado al tráfico de graneles agroalimentarios.
Galigrain da el primer paso para iniciar su traslado al puerto exterior de La Coruña, que espera completar a finales de 2017, cuando la nueva dársena esté plenamente operativa y tenga accesos por tren. El operador gallego, del grupo Nogar, solicita concesión para construir una nave destinada al tráfico de graneles agroalimentarios
Galigrain, perteneciente al grupo Nogar, inicia el traslado de la actividad que desarrolla en los muelles interiores de La Coruña al puerto exterior. Un proceso que espera completar a finales de 2017, una vez que la nueva dársena esté plenamente operativa y cuente con acceso ferroviario, “vital” para el desarrollo de sus tráficos. Así lo aseguraron a este periódico fuentes del operador gallego, que ha solicitado una concesión, con una vigencia de 35 años, para la construcción de una nave, especialmente diseñada para el almacenamiento de graneles agroalimentarios. La nueva instalación dispondrá de una superficie de 9.500 metros cuadrados y una altura máxima de 30 metros.
La previsión inicial de Galigrain es alcanzar un movimiento anual de 100.000 toneladas. No obstante, en la solicitud se prevé una ampliación de la instalación, con el consiguiente incremento en el tráfico. Al cierre de esta edición, el proceso se encontraba en la fase de información pública del trámite de competencia de proyectos. Una vez cumplimentada esta tramitación, se espera otorgar la concesión este mismo mes e iniciar las obras para que la nave pueda estar operativa el próximo año.
La inversión prevista por el operador local es de 4,5 millones de euros, cantidad a la que se sumará el coste de una grúa de altas prestaciones para la carga y descarga de estos productos, que aún está por definir, explicaron las mismas fuentes. El grupo Nogar, uno de los principales clientes del puerto de La Coruña, gestiona actualmente cinco concesiones para el almacenamiento de graneles agroalimentarios, con un movimiento anual de cerca de 1,3 millones de toneladas.
Para los responsables de la Autoridad Portuaria, la iniciativa de Galigrain es de “especial trascendencia” en el desarrollo del puerto exterior, que permite, además, alejar del casco urbano los graneles sólidos, uno de los tráficos de mayor impacto medioambiental, que fue “uno de los retos principales” que propiciaron la ejecución de la ampliación.