Flores se compromete a rebajar las tarifas de forma significativa tras comprobar el malestar patronal por la eliminación de ayudas.
Las arcas autonómicas se embolsaron 20 millones de euros por tasas al transporte por carretera en la última década en la Comunidad Valenciana. Mario Flores se ha comprometido a rebajar las tarifas de forma significativa tras haber comprobado el malestar de patronales y empresarios por eliminar en 2011 todas las ayudas al transporte
La Generalitat Valenciana recaudó alrededor de 20 millones de euros por tasas de ordenación del transporte por carretera en la última década. Entre 2001 y 2009, la administración autonómica ingresó una media de dos millones anuales, una recaudación en progresión desde los 1,5 millones ingresados en 2001 hasta los tres millones del año 2008. La recaudación bajó un 30 por ciento en 2009, hasta 2,3 millones, por la incidencia de la crisis, aunque la Generalitat mantiene una previsión de ingresos de 4,5 millones de euros por estas tasas en los ejercicios 2010 y 2011, según los presupuestos.
Esta política de ingresos “choca con la supresión durante 2011 del plan de ayudas al transporte y las subvenciones para formación a patronales y cámaras de comercio”, unas ayudas cifradas en diez millones de euros en los últimos tres años. Su eliminación ha generado cierto malestar de patronales y empresarios que demandan que “las tasas que paga el negocio tengan un retorno”. Ante este escenario, Mario Flores, consejero de Infraestructuras y Transportes, anunció el pasado mes de abril que “se bajarán de forma significativa las tasas” para ayudar el sector.
La tasa de ordenación del transporte por carretera recoge las autorizaciones sujetas a gravamen en la Ley de Tasas de la Generalitat Valenciana de 1997, cuyo texto fue refundido en 2005 y que dispuso los gravámenes a aplicar para cada tipo de servicio de transporte. Desde 2005 hasta 2011, las diferentes tarifas aplicadas a las actuaciones administrativas sujetas a gravamen en el sector del transporte se han incrementado en un 10,5 por ciento.
En concreto, la expedición de un certificado de capacitación ha pasado en un plazo de seis años de 26,01 euros a 28,82 euros, la expedición de una tarjeta de transporte ha aumentado su cuantía de 25,30 euros a 27,96 euros, mientras que la expedición de tarjetas de tacógrafo digital ha pasado de 30 a 33,13 euros.