ADIF adapta Fuente de San Luis para trenes de 750 metros, pero hoy resulta imposible mover contenedores pese a que la Generalitat posee terrenos vacíos junto a la estación.
El megaproyecto de futura terminal ferroviaria de Valencia sigue ‘en el aire’, mientras los tráficos con el puerto de Valencia se disparan a un ritmo del 60%, lo que ha llevado a ADIF a adaptar Fuente de San Luis para trenes de 750 metros. La estación continúa sin poder manipular los contenedores pese a que la Generalitat tiene terrenos anexos.
La gran terminal ferroviaria de Valencia sigue ‘en el aire’. El megaproyecto, anunciado en la última legislatura del Gobierno de Zapatero por el anterior Secretario de Transportes, José Luis Cachafeiro y que fue incluido por el equipo ferroviario de Ana Pastor en la actual hoja de ruta del Gobierno de Rajoy sigue ‘sine die’ dentro de las previsiones que maneja el ADIF, que preside Enrique Verdeguer.
El objetivo histórico es reconvertir la actual estación de clasificación de trenes ubicada en Fuente de San Luis en un moderno complejo logístico que permita tanto la composición de convoyes como el tratamiento logístico de cualquier tipo de mercancía, en especial, de contenedores. Esta futura nueva terminal debería venir a sustituir a Silla, dentro de las históricas conversaciones que tenían el Ayuntamiento de esta localidad valenciana y el Ministerio de Fomento, que aceptó el traslado de la instalación.
Sin embargo, el alto coste del proyecto en Fuente de San Luis, en el entorno de 200 millones de euros, unido a la reciente decisión de mantener durante al menos cinco años más la terminal de Silla, viene a unirse la elevada burocracia administrativa entre Fomento y la Generalitat Valenciana.
REIVINDICACIÓN HISTÓRICA
El ejecutivo autonómico viene reclamando un posicionamiento claro por parte de Fomento en el desarrollo de terminales ferroviarias que acompañen a presentes y futuros tráficos ferroviarios. Fuentes de la Generalitat han apuntado a TRANSPORTE XXI que “hoy la interlocución con el ADIF está abierta”, si bien, por el momento, el desarrollo de la terminal está paralizado y no se ha consensuado cómo abordar la financiación de la misma. Un modelo posible sería un concurso para construir y explotar la futura terminal ferroviaria dentro de un escenario público-privado de inversión. Hoy todo continúa pendiente de los presupuestos del ADIF para el próximo ejercicio de 2013.
Mientras los tráficos ferroviarios desde y hacia el puerto de Valencia se disparan en un 60 por ciento durante el primer semestre de 2012. La situación empieza a obligar a tomar medidas concretas para que no se produzca una saturación con el recinto portuario.
De ahí que el Adif haya iniciado recientemente obras de mejora y ampliación de las instalaciones de Fuente de San Luis para acoger trenes de 750 metros de longitud. La actuación, con una inversión de 1.099.364 euros, incluye mejoras en cuatro vías del haz norte de la estación, las 12, 14, 16 y 18, a la longitud de 750 metros. Este haz es el primero de los seis carriles que organizan la operación de trenes mercantes en Fuente de San Luis, que cuenta con un total de veinticuatro vías.
Con esta obra será posible incrementar la capacidad de la estación de clasificación, ya que se evitarán las maniobras especiales para formación de trenes de gran longitud, agilizando las operaciones ferroviarias y, consecuentemente, elevará la productividad del eje Madrid-Valencia y del corredor mediterráneo.
Hay que recordar que en la estación de clasificación de Fuente de San Luis sólo se pueden componer en la actualidad los convoyes y no existe un tratamiento logístico de contenedores y mercancías, pese a que la Generalitat Valenciana dispone junto a la instalación ferroviaria de una extensa superficie. El área está reservada y proyectada por la Generalitat para dar servicio de manipulación de mercancías, tras haber albergado varios depósitos de contenedores en los últimos años. Estos terrenos junto a los actuales del ADIF son el ansiado pulmón logístico de la anunciada futura macroterminal ferroviaria de Valencia.