Andrés Recalde
La Ley 15/2009 pretende cubrir una llamativa laguna del Derecho español. Aunque pueda sorprender el contrato de transporte seguía sometido a las previsiones de los Códigos Civil y de Comercio de finales del siglo XIX. Es decir, a normas anteriores a la aparición de cualquier vehículo de motor o de los modernos trenes, que tan poco tienen que ver con los ferrocarriles de 1885