El puerto reactiva la negociación con las empresas para zanjar los litigios judiciales y la deuda histórica de la sociedad de estiba.
Puertos de Las Palmas apela al diálogo para salvar la coyuntura de la dársena canaria con una fuerte reducción en el tráfico de contenedores en los últimos meses. El puerto está reactivando la negociación directa con las empresas para zanjar los litigios judiciales y la deuda histórica de la sociedad de estiba del puerto de La Luz.
La Autoridad Portuaria de Las Palmas, que preside Luis Ibarra, apela al diálogo para salvar la coyuntura que sufre la dársena canaria. La fuerte reducción en el tráfico de contenedores es palpable y amenaza el empleo en la dársena y la rentabilidad de las empresas estibadoras Opcsa y Boluda. Ambas terminales sufren una caída del 18 por ciento en los dos primeros meses de 2014.
El puerto ha consolidado un tráfico de sólo 141.971 TEUs hasta febrero, lo que vendría a suponer un cierre anual por debajo de 900.000 TEUs, de mantener idéntico ritmo. Para frenar la sangría de tráficos es determinante para el puerto zanjar la incertidumbre que sufre el deterioro histórico de las relaciones empresariales y laborales en la dársena canaria. Para ello, el puerto ha reactivado la negociación con las empresas y quiere zanjar los litigios judiciales abiertos, así como la deuda histórica de la sociedad de estiba.
El pasado mes de marzo, los juzgados canarios emitieron dos sentencias importantes para el negocio de estiba de la rada. La Justicia dio la razón al puerto que reclamaba a la Sagep el pago de un préstamo concedido por La Caixa y que venía liquidando la Autoridad Portuaria por su condición de avalista. El puerto de Las Palmas mantenía la condición de avalista solidario desde 2009 por el 100 por ciento de un crédito por importe de 8 millones a favor de la Sagep de Las Palmas, que obtuvo ésta y que tiene fecha de vencimiento el 30 de septiembre de 2019.
Durante 2012, el puerto hizo efectivo el pago de 946.252 euros por las cuotas del préstamo, de cuyo pago acaba de ser liberado. Por otro lado, el puerto de Las Palmas deberá devolver alrededor de 2 millones después de que un juzgado de lo Mercantil haya fallado a su favor, ratificando el proceso de privatización de la sociedad de estiba, obligado por la Ley de Puertos, aunque confirma que las acciones de la compañía se valoraron de forma errónea, ya que al puerto se le asignó una compensación de dos millones al abandonar la sociedad y sólo tendrá que recibir 35.000 euros.
Por su parte, hay que recordar que la Sagep remitió en febrero de 2012 un escrito de reclamación patrimonial por vía administrativa en concepto de daños y perjuicios por obligaciones económicas derivadas del déficit de la extinta Sestiba, cuantificación del pasivo laboral y gastos financieros soportados por la sociedad como consecuencia del déficit histórico de 29,18 millones de euros. Esta reclamación fue desestimada por el puerto en junio de 2012. Ibarra afirmó en el acto de entrega de los premios de la Fundación Puerto Las Palmas que “esta vez se pueden cerrar los conflictos históricos con las empresas para poder avanzar”, y añadió que “próximamente sabremos si este enésimo intento es el definitivo”.
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