El sector consigue una vieja demanda con el nuevo negociado de Palao, que tendrá voz en las Comisiones Delegadas del Gobierno y el Consejo de Ministros de Bruselas.
La ministra Alvarez ha ganado la batalla abierta con la vicepresidenta De la Vega para conseguir la Secretaría de Estado de Transportes, la tercera de su cartera, que tiene como titular a Fernando Palao. Con el nuevo negociado, que sitúa a Transportes al mismo nivel que Infraestructuras, el sector ve hecha realidad una histórica demanda
El sector está de enhorabuena. El transporte ya tiene una Secretaría de Estado en el organigrama del Ministerio de Fomento, a cuyo frente está Fernando Palao, cumpliéndose así una vieja demanda sectorial. El nuevo negociado, que viene a sustituir a la Secretaría General de Transportes que comandaba el propio Palao (con rango de subsecretaría), supone subir un peldaño en la pirámide del Gobierno. Su creación no ha sido tarea fácil. Tal como adelantó este periódico en su edición del pasado 1 de julio, la ministra Alvarez no contaba con el apoyo de la vicepresidenta De la Vega para enfilar su segunda legislatura con tres Secretarías de Estado (en la anterior sólo existía una en Fomento). La mano derecha de Zapatero sólo aceptaba dos, una de Planificación y otra de Infraestructuras, que cayeron en manos de Victor Morlán y Josefina Cruz, respectivamente.
De la Vega, entonces en plena batalla con Alvarez por las competencias en Salvamento Marítimo, que la primera intentó arrebatar a la segunda para traspasarlas a la nueva cartera de Espinosa, no dio pase a la secretaría de Estado de Transportes. Su argumento oficial era “la necesidad de controlar el gasto público en plena desaceleración económica”, aunque había mar de fondo con el litigio por Sasemar, uno de los buques insignia de la secretaría general de Palao, que puso el grito en el cielo ante la intención de la vicepresidenta de meterle mano en su negociado para quitarle las citadas competencias, aseguraron fuentes solventes. Pero parece que las aguas han vuelto a su cauce. Salvamento Marítimo se queda donde está y Fomento consigue la secretaría de Estado de Transportes que demandaba Alvarez y el propio sector.
Según medios oficiales, la ministra “se ha fajado no sólo con la vicepresidenta De la Vega, sino también con el vicepresidente Solbes y con la cartera de Administraciones Públicas”, que vienen demandando una contención del gasto en la creación de nuevos altos cargos. Las mismas fuentes añadieron que “lo más probable es que la nueva Secretaría de Estado de Transportes se amortice con la desaparición de la antigua secretaría general del ramo. Esto mismo no ocurrirá en el caso de la Secretaría General de Infraestructuras, que se mantendrá aunque se haya creado una Secretaría de Estado ad hoc”.
Al cierre de esta edición aún no se había publicado en el BOE cómo quedaba el nuevo organigrama de la cartera de Alvarez. La creación de esta Secretaría de Estado no es una cuestión baladí. El estatus otorgado a Fernando Palao, que acogerá bajó el nuevo paraguas las mismas direcciones generales y entes públicos que cuando era secretario general del ramo, le permitirá sentarse en las comisiones delegadas del Gobierno y en los Consejos de Ministros de Bruselas.
Durante su toma de posesión del pasado 21 de octubre, Palao dijo que “la creación de una Secretaría de Estado de Transportes es la concreción de una aspiración histórica de los operadores y expertos del transporte de tener un órgano regulador y de control equiparado, en cuanto a su nivel jerárquico, con el resto de los órganos de planificación y gestión de las inversiones del Ministerio de Fomento”. Por su parte, la ministra aseguró que “significa ampliar nuestra capacidad de acción como Ministerio para trabajar por un transporte más moderno, más seguro y con más posibilidades de desarrollo”.
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