Acude al Comité Nacional arropada por altos cargos de Trabajo, Economía e Interior para buscar soluciones a la crisis del sector.
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, arropada por altos cargos de Trabajo, Economía e Interior, mantuvo el 29 de abril una reunión con el Comité Nacional del Transporte por Carretera para buscar soluciones a la crisis del sector. La puesta en escena evidencia la importancia del transporte por carretera para el nuevo Ejecutivo
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, afronta su segunda legislatura con la lección aprendida. El transporte por carretera, representado por el Comité Nacional, que en octubre de 2005 convocó un paro de tres días al sentirse ninguneado por la titular de Fomento, se ha convertido en esta ocasión en el primer colectivo con el que mantiene un encuentro tras su confirmación en el cargo. En la reunión con el Comité Nacional del Transporte por Carretera, que tuvo lugar el pasado 29 de abril, Magdalena Álvarez reconoció “la importancia del sector en su aporte a la economía” y la “difícil situación” por la que atraviesa en estos momentos.
Para reforzar sus tesis, la titular de Fomento se presentó arropada por altos cargos de los ministerios de Trabajo, Economía e Interior, lo que causó una grata sorpresa entre los transportistas. Una puesta en escena que deja claro el carácter prioritario del transporte por carretera para el nuevo Ejecutivo de Rodríguez Zapatero. Durante el encuentro con el Comité Nacional, la ministra de Fomento se comprometió a crear tres mesas de trabajo con los diferentes ministerios implicados para abordar las principales reivindicaciones de los empresarios, como la revisión del baremo sancionador, el establecimiento de un tipo infractor que sancione la contratación por debajo de costes y la posibilidad de incrementar la partida presupuestaria para incentivar las ayudas al abandono de la actividad a los transportistas de más de 60 años.
Respecto a las ayudas del Instituto de Crédito Oficial, que hasta la fecha ha favorecido a 7.062 empresas de transporte con una inversión de 324 millones de euros, Fomento planteará el mantenimiento de la línea de crédito ICO-Transporte. Todas las asociaciones coincidieron en señalar la situación tan crítica por la que atraviesa el sector, con una subida importante en los costes, en particular del gasóleo, y una disminución notoria de la actividad. El presidente de la Federación Valenciana de Empresarios Transportistas (FVET), Francisco Corell, afirmó que “la baja productividad generada por la entrada en vigor de nuevas normativas -como la Directiva de Tiempos de Trabajo-, el retroceso del sector inmobiliario y la irregular coyuntura económica financiera abocan a las empresas a una notable pérdida de rentabilidad”.
Para solventar esta situación, los transportistas consideran necesario establecer “con carácter obligatorio” una fórmula de fijación de precios que permita trasladar a las tarifas del servicio de transporte de mercancías por carretera las variaciones de costes derivadas de la oscilación del precio del combustible. Corell recordó que “el combustible representa el 40 por ciento de los costes de explotación de un camión, y el alza en su precio pone en peligro la viabilidad de muchas empresas”. Ley de Contrato de Transporte El director general de Transportes por Carretera, Juan Miguel Sánchez, avanzó, en este sentido, que Fomento trabajará para lograr que se incluya la cláusula de revisión de los precios en función del coste del gasóleo como “obligatoria” en la futura Ley de Contrato de Transporte Terrestre, que ultima el Ministerio de Justicia.
Esta cláusula, además, también se aplicaría al transporte internacional, una de las demandas de la Asociación del Transporte Internacional por Carretera (Astic), que preside Pere Padrosa. De este modo, Fomento lograría superar la situación creada con las Condiciones Generales de Contratación de los transportes de mercancías por carretera, que excluye de su ámbito de aplicación los servicios cuyo origen o destino se encuentren fuera de España. Entre las principales reivindicaciones de las dos grandes patronales del sector, Astic y CETM, se encuentran la modificación de los aspectos más negativos de la normativa relativa a los Tiempos de Trabajo, la eliminación de la discriminación fiscal entre empresarios autónomos y personas jurídicas en la imposición directa e indirecta, así como la creación de corredores libres de prohibiciones de circulación en España y la defensa de los mismos en la Unión Europea.
En este último punto, sin embargo, el director general de Tráfico, Pere Navarro, no cree conveniente pedir la armonización de restricciones en Europa, ya que Francia y Alemania tienen restricciones establecidas e impondrían sus criterios. En lo concerniente a las restricciones al tráfico en España, Navarro se comprometió a celebrar un encuentro con el departamento de Tráfico de Cataluña y País Vasco para tratar de armonizar las restricciones. Al mismo tiempo, entre otras reivindicaciones, las patronales exigen la modificación de la normativa sobre tiempos de conducción y descanso, para hacer más flexible la actividad de las empresas, la construcción de nuevas infraestructuras viarias y áreas de descanso, así como potenciar el transporte intermodal. Igualmente, los transportistas solicitan una menor inspección en materia de transporte y una reducción del baremo sancionador y la eliminación del céntimo sanitario.
Por su parte, Julio Villaescusa, presidente de Fenadismer, organización más representativa de los autónomos, afirmó que “de no establecer medidas contundentes para solucionar la crisis del sector, nos vemos abocados a un paro nacional” e insistió en la necesidad de “arbitrar medidas que permitan repercutir el incremento de los costes a los precios de transporte, evitando trabajar por debajo de costes”. Villaescusa, en este sentido, considera necesario que el contrato en materia de transporte se haga obligatoriamente por escrito.