La escasez de plataformas con una capacidad mayor a 10.000 m2 abrirá la posibilidad de activar proyectos públicos y privados de suelo que se plantearon antes de la crisis.
La parálisis promotora inmobiliaria está condicionando la llegada de nuevos operadores logísticos en Valencia. La escasez de plataformas logísticas construidas con una capacidad mayor a 10.000 metros cuadrados va a abrir la posibilidad en los próximos meses de activar proyectos públicos y privados de suelo planteados antes de la crisis
La parálisis en la promoción inmobiliaria de suelo logístico en Valencia está condicionando la llegada de nuevos operadores logísticos. La escasez de plataformas logísticas cubiertas construidas en Valencia con una capacidad mayor a 10.000 metros cuadrados tenderá a abrir la posibilidad en los próximos meses de activar proyectos públicos y privados de suelo paralizados durante la crisis en el periodo entre 2008 y 2012, según coinciden diversos operadores consultados por TRANSPORTE XXI. Bolsas públicas de suelo como las ubicadas en las zonas logísticas de Valencia y Sagunto y el Parque Logístico de Ribarroja son atractivas, junto a los desarrollos privados previstos en municipios como Paterna, Vallada, Sollana, Masalavés o Alberique, entre otros.
Estos proyectos tienen ahora posibilidades efectivas de ponerse en marcha “si la demanda de transporte y almacenamiento crece en positivo”, según explica un operador Un informe de BNP Paribas Real Estate coincide en que la escasez de naves logísticas se está acelerando en los últimos meses dado el fuerte desarrollo que ha experimentado el mercado logístico en Valencia. La expansión de la actividad de la planta de automóviles de Ford en Almussafes, la actividad portuaria y la integración de nuevas actividades de distribución hacia el sur de Francia han sido claves para el buen comportamiento de la demanda de suelo en los últimos meses.
Hoy el principal demandante de suelo en la provincia de Valencia es el usuario final de la logística, ya que sólo una de cada tres operaciones inmobiliarias está siendo realizada por operadores logísticos. Durante 2013 se contrataron 130.000 metros cuadrados en Valencia, un 11 por ciento menos que en 2012 que fue de 146.000 metros cuadrados. La mayoría de los contratos realizados fueron motivados por una expansión de la actividad y sólo un 30 por ciento de las operaciones fueron por razones de consolidación y mejora de las instalaciones.
La mayoría de las operaciones realizadas se centró en naves de formato mediano o pequeño, debido principalmente a la escasez de instalaciones acabadas de gran tamaño. Desde BNP Paribas se afirma que hoy existen demandas de naves de más de 10.000 metros cuadrados que no consiguen una ubicación de forma inmediata, alargando así la posibilidad de instalación en espacios ajustados a las necesidades de los operadores que quieren ubicarse en el entorno metropolitano.
En los últimos meses ha destacado la implantación de proveedores para la factoría de Ford como Grupo Antolin en Sollana con una plataforma logística de una superficie de 34.223 metros cuadrados, Johnson Controls en Sollana, con una nave de 7.600 metros cuadrados, el desembarco de Grupo Valmo en Almussafes con la adquisición de una nave de 19.120 metros cuadrados, la apertura de nuevas naves de Grupo Fundosa para la realización de fabricación y montaje de componentes para Ford y la apertura de nuevas instalaciones de Transfesa y Instant Link. Por último las nuevas instalaciones de la empresa de transporte urgente Tipsa y el traslado de Rhenus Logistics de Albuixech a Ribarroja, con la puesta en marcha de una plataforma de 18.534 metros cuadrados de nave, fueron las operaciones más destacadas del año.