La patronal Pimec ha pedido al Ministerio de Fomento que se ejecuten las obras de enlace entre la autovía A-2 y la autopista AP-7 a la altura de Castellbisbal (Barcelona), que afectan al transporte que se dirige al puerto de Barcelona.
Esta actuación, largamente reclamada por los agentes económicos de la zona, está afectada por el recorte presupuestario de la cartera de José Blanco. La paralización de las obras perpetúa los atascos diarios que suponen un impacto económico negativo para el transporte de mercancías y para el medio ambiente, según la patronal Pimec.