Los transportistas observan un brusco frenazo en la exportación que cae un 6,8%, mientras los servicios de importación bajan un 0,60%.
La petición de camiones por parte de cargadores, transitarios y operadores para contenedores llenos en el puerto de Valencia ha caído un 3,8 por ciento en el primer cuatrimestre de 2008. Los transportistas están sufriendo un fuerte frenazo en su actividad ante el descenso del tráfico de exportación, que acumula una caída del 6,8 por ciento
Los datos del mes de abril confirman la tendencia iniciada a finales del último trimestre de 2007. La crisis del import-export es un hecho en el puerto de Valencia. Sólo el tránsito de contenedores, que ya supone el 38,87 por ciento del volumen global, vuelve a salvar los resultados del enclave valenciano, que aumenta un 7,53 por ciento el tráfico gracias a 75.956 TEUs de transbordo (ver cuadro superior).
Donde la crisis se acentúa es en el sector del transporte por carretera, donde la petición de camiones por parte de cargadores, transitarios y operadores logísticos para contenedores llenos ha caído un 3,8 por ciento en el primer cuatrimestre de 2008. Flotistas y autónomos (cerca de 5.000 camiones operan a diario en el interior del puerto valenciano) están sufriendo una importante merma en su actividad normal acostumbrados en los últimos quince años a contínuas sendas de crecimiento.
La caída más importante está en el descenso de los tráficos de exportación, con una bajada del 6,8 por ciento en la demanda de servicios para contenedores llenos, y que sólo se ve paliada por el tráfico de contenedores vacíos, que aumentó un 19 por ciento hasta abril. Por su parte, los servicios de importación de contenedores llenos también se están viendo afectados, con una desaceleración hasta abril del 0,60 por ciento, si bien los vacíos sufren una caída del 15,4 por ciento.
La Autoridad Portuaria de Valencia, que preside Rafael Aznar, y la Federación Valenciana de Empresarios Transportistas, que preside Francisco Corell, han acordado junto con las asociaciones de transportistas portuarios ELTC, Transcont, AIT, Transconval y ATPE, formalizar una “mesa de crisis” a imitación del comité nacional del transporte, con el objetivo de sentar periodicamente a la mesa a transitarios y consignatarios para analizar la contínua alza del gasóleo y la caída de la demanda en el puerto.