El presidente de la patronal alemana VDA cree que el desarrollo vendrá de China, India, Brasil y otros mercados emergentes.
Con la vista puesta en el próximo Salón de Vehículos Industriales de Hanóver, el presidente de la patronal alemana VDA, MatthiasWissmann, repasó la situación de la industria del camión y el transporte.Wissmann cree que la recuperación de los fabricantes será “lenta” en Europa y que el crecimiento vendrá de China, India, Brasil y otros mercados emergentes
La asociación alemana de la industria del automóvil (VDA), apunta que a finales de 2010 los niveles de producción en Europa occidental, Norteamérica y Japón aún se encontrarán un 30 o un 40 por ciento por debajo de los de 2008. Se prevé que el crecimiento económico global ascienda al 4 por ciento en el presente año impulsado principalmente por el desarrollo de los mercados emergentes, ya que la recuperación en otras áreas, Europa entre ellas, será bastante menos dinámica. Dentro de Europa, hay países como Alemania en que se estima que la demanda de transporte por carretera podría cerrar 2010 con un avance del 6 por ciento, recuperando en 2011 los niveles de 2007.
En efecto, desde mediados del año pasado, el mercado estadounidense de vehículos industriales muestra síntomas de recuperación. El presidente de VDA, Matthias Wissmann, piensa que en 2010 podría crecer un 11 por ciento respecto a 2009. En Brasil, el mercado más importante de toda Suramérica, las ventas han crecido este año más de un 50 por ciento. Pero el motor de la recuperación es sin duda el mercado chino, que ya supone más del 30 por ciento de la demanda mundial de camiones de más de 6 toneladas. Este año, las ventas podrían llegar a crecer un 40 por ciento en China.
Aún aceptando que el crecimiento chino es bastante inestable, los expertos señalan que su balance final será muy positivo. De todos modos, siempre está ahí el mercado indio para reforzarlo. Centrándonos en Alemania y pese a que 2009, año álgido de la reciente crisis, vio cómo las ventas de vehículos industriales se hundían a menos de la mitad de las del año previo, llegando incluso a bajar un 80 por ciento -a los niveles de 1995- en el caso de los remolques y semirremolques, los fabricantes alemanes de aquellos vehículos aguantaron el embite y consiguieron que el efecto sobre la reducción del empleo fijo generado por ellos sólo fuese del 5 por ciento.
Sensiblemente más -el 9 por cientofue el recorte que se vieron forzados a dar al empleo fijo los constructores alemanes de remolques y semirremolques, aún así limitado para la brutal contracción que experimentaron sus ventas. Para 2010, las estimaciones apuntan a que las ventas de remolques y semirremolques pesados de varios ejes podrían rebasar en Alemania el nivel de 40.000 unidades, lo que significaría una recuperación del 12 por ciento con respecto al año 2008.