El titular de Fomento, ante el reto de situar al transporte entre sus prioridades, apuesta por el diálogo, tras reconocer que “hay asuntos que urgen y no hay tiempo que perder”
La reforma de la estiba, cuyo modelo declaró “ilegal” hace casi dos años el Tribunal de Luxemburgo, y el desarrollo del Reglamento de Ordenación de los Transportes Terrestres (ROTT), tres años después de la modificación de la LOTT, son las ‘patatas calientes’ del nuevo ministro Íñigo de la Serna, consciente de que “hay asuntos que urgen y no hay tiempo que perder”.