La rusa GAZ, que asegura controlar el 50 por ciento de su mercado doméstico de vehículos comerciales ligeros acaba de introducir un nuevo modelo, bautizado con el nombre Next, en su gama GAZelle. Ha requerido unas inversiones de 5.000 millones de rublos (unos 121 millones de euros) y año y medio de desarrollo, según aseguran en GAZ.
El Next es el primer vehículo que se introduce en el mercado ruso con una garantía de tres años ó 200.000 kilómetros. Inicialmente, se va a construir sólo en versión volquete lateral, pero está previsto lanzar posteriormente la versión para carga.
Los Next cubren el rango de tonelaje que va desde 2,8 a 5 toneladas y aunque comparten el 50 por ciento de sus elementos con los modelos de la gama GAZelle que ya se venían comercializando, la rusa ha llegado a acuerdos con proveedores occidentales para el suministro de ciertos órganos clave como dirección (ZF), amortiguadores y elementos de los frenos (Mando y Bosch), “silentblocks” (Anvis), columnas ajustables de la dirección (CSA Castellón), embragues (Sachs), cinturones de seguridad (Takata), calefacción ventilación y aire acondicionado (Delphi) y butaca del conductor (Isringhausen).
GAZ, que en 2012 vendió más de 100.000 GAZelle, ha abierto una planta de ensamblaje en Turquía para atender la demanda de este mercado. Allí, los motores que se ofrecen son Euro 5, por necesidades legales, normativa que se cumple con el motor Cummins, dotado sólo de recirculación de los gases del escape.