Kamaz, el fabricante ruso de camiones en el que el grupo alemán Daimler tiene un 10 por ciento de participación, ha vuelto a recuperar la semana completa de actividad productiva, después de que en 2009 se viera obligado a suspender la actividad en varias ocasiones como consecuencia de la caída de la demanda de vehículos industriales en el mercado ruso y su área de influencia. Las dificultades que atravesó Kamaz durante 2009 forzaron a esta compañía a tener que solicitar una línea de crédito por valor de unos 112 millones de euros para financiar sus actividades productivas.
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