La nueva terminal agroalimentaria del puerto de Santander, cuyo arranque estaba previsto en febrero, ultima su puesta a punto y podría echar a andar en breve. Fuentes de la estibadora Tasa, adjudicataria del proyecto, avanzaron que están prácticamente finalizadas las obras, que absorbieron una inversión próxima a los 38 millones.
El tráfico mínimo anual fijado en el primer año de operaciones es de 400.000 toneladas, aunque a medio plazo se espera alcanzar los 2 millones. La instalación ocupa cerca de 33.500 metros cuadrados y cuenta con dos zonas de almacenamiento diferenciadas.