La terminal intermodal junto a la frontera se desarrollará sólo con la involucración de un privado

Tradisa, que no tiene una decisión tomada, interesada para subir sus tráficos al tren.

La terminal intermodal de Gerona, que promueven Cimalsa y el puerto de Barcelona, sólo se desarrollará si un privado garantiza tráficos. Al conocido interés de Lorry Rail, se suma Tradisa, con quien las negociaciones están más avanzadas. Tradisa quiere incrementar la cuota del tren, ahora residual, en su tráfico internacional

La terminal intermodal El Far d’Empordà-Vilamalla (Gerona), a unos 15 kilómetros de la frontera, se construirá únicamente si hay una demanda concreta y el sector privado asume parte del riesgo. Y hay un operador interesado en firme, Tradisa. Cimalsa, empresa pública de la Generalitat, y la Autoridad Portuaria de Barcelona constituyeron la sociedad Terminal Intermodal Empordà (TIE) en 2010 para desarrollar el proyecto, con una inversión inicial estimada de 150 millones de euros.

La crisis ha obligado a redimensionarlo. Según los cálculos de Cimalsa, se necesitarían menos de 10 millones de euros para poner en macha la primera fase en una superficie de 3,5 hectáreas, aprovechando la estación ferroviaria existente con ancho de vía ibérico, que está en desuso, y dotándola de ancho internacional. “Con una inversión mínima, se tendría la máxima operatividad inmediata y sin hipotecar futuros crecimientos”, señala a este periódico Isidre Gavín, director general de Cimalsa. Sin embargo, “de no haber el compromiso de un privado para operar, que asuma parte de la inversión y del riesgo, no se construirá”.

Las estrecheces presupuestarias de la Generalitat no serían un freno para la aportación pública. “Confiamos en compartir la inversión con el Ministerio de Fomento. Nosotros asumiríamos el coste de llevar el ancho internacional al interior y el Adif la conexión exterior”. La propuesta ha tenido “buena acogida” por parte del ente público, sobre todo, “porque hay empresas interesadas”. Se trata de Tradisa, especializada en el transporte y servicios logísticos al sector de la automoción, y Lorry Rail, que gestiona la autopista ferroviaria entre Francia y Luxemburgo.

Con Tradisa, que firmó un preacuerdo con TIE, las negociaciones están más avanzadas. “Tenemos interés en participar, no sabemos cómo, pero sí que queremos estar, aunque la decisión final dependerá de las condiciones”, señalan fuentes del operador. El tren tiene una cuota residual en sus tráficos internacionales, “nuestro objetivo es utilizarlo más”. La fórmula de colaboración público- privada se definirá en un estudio que cofinancia Bruselas.