El grupo sueco Volvo, que construye y vende camiones también con las marcas Renault, Mack, UD y Eicher, entregó 10.791 vehículos en enero, lo que supone un retroceso del 23 por ciento con relación al mismo mes de 2012, registrando así la mayor caída desde diciembre de 2009, mes en que las entregas del grupo bajaron un 29 por ciento. La anterior cifra de entregas no incluye los 3.209 vehículos de la india Eicher Motors que, por haber cambiado Volvo las normas contables desde principios de este año, han dejado de ser consolidadas en el conjunto de las ventas del grupo.
Si se tienen en cuenta las 3.209 unidades entregadas por Eicher, el descenso se suaviza, ya que las 14.021 unidades que suman todas las marcas representan una caída de sólo el 19 por ciento. Volvo ya había anunciado hace pocas semanas, al presentar sus resultados, que sus factorías estaban trabajando a mitad de su capacidad máxima, debido a que la demanda se había frenado de manera muy notable.
En efecto, las entregas en Europa en enero se redujeron un 30 por ciento, y un 38 por ciento en Norteamérica. Fue particularmente importante la caída del 29 por ciento en las entregas de camiones Renault Trucks, que alcanzó el 33 por ciento si sólo se considera el mercado europeo.
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