Los sindicatos no se pronuncian, pero advierten que la Federación tiene el mismo derecho a estar en la mesa que el operador logístico.
CETM, Astic, Lógica y Aecaf han cerrado filas en torno al II Acuerdo General para el sector del transporte por carretera y han dejado fuera de la negociación a Fenadismer, que acudirá a los tribunales. Los sindicatos se mantienen al margen, pero advierten que “Fenadismer tiene el mismo derecho a estar en la mesa que el operador logístico”.
El II Acuerdo General para las empresas de transporte de mercancías por carretera va camino de convertirse en un auténtico culebrón. El futuro de las negociaciones lejos de aclararse cada vez se enreda más. Tras la irrupción en la mesa negociadora de Fenadismer, que se autoproclama gran patronal del sector, la parte empresarial, representada por CETM, Astic, Lógica y Aecaf, ha cerrado filas en torno a este asunto y mantiene su oposición a dar entrada a Fenadismer, “organización que representa los intereses de los transportistas autónomos”, según señalaron a este periódico fuentes de la parte empresarial.
La Federación que preside Julio Villaescusa, por su parte, ya ha hecho pública su intención de impugnar judicialmente la constitución de la mesa, dando traslado de dichas actuaciones a las direcciones generales competentes del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. El útimo episodio de este culebrón tuvo lugar el pasado 17 de enero, fecha en la que estaba convocada una nueva reunión en la sede de UGT en Madrid.
El encuentro, al que asistieron las organizaciones Fenadismer y Confedetrans, no llegó a celebrarse. Las patronales CETM, Lógica, Astic y Aecaf estuvieron presentes en otra sala del edificio del sindicato y propusieron a los interlocutores sociales celebrar la próxima reunión del II Acuerdo General el 30 de enero en la sede de la CEOE. Este acuerdo ha hecho mella en Fenadismer, que acusa a CETM, Astic, Lógica y Aecaf de “querer ocultarse en el búnker de la sede de CEOE para tratar de impedir nuestra participación en la negociación”. El presidente de Fenadismer, Julio Villaescusa, lamentó esta situación y aseguró a este periódico que “es triste que personas que están en la representación empresarial, que se supone tienen un cierto nivel de seriedad, tengan que andar escondiéndose a estas alturas”.
Como ya adelantó este periódico, Villaescusa insiste en que su organización tiene “derecho a participar en la negociación colectiva”, porque representa a todo tipo de empresas, grandes y pequeñas”, y acredita ser la segunda fuerza del Comité Nacional del Transporte, por detrás de CETM. Así las cosas, el escenario que se vislumbra aparece muy oscuro. La judicialización de las negociaciones del II Acuerdo General, en vía muerta desde 2000, desencadenará una ‘guerra de representatividad’ entre las distintas organizaciones empresariales, que podría estancarse durante años en los tribunales.
Los sindicatos han preferido quedarse al margen de esta polémica, ya que “la decisión de quién forma parte de la pata empresarial atañe a las propias patronales”. No obstante, el secretario de Acción Sindical de Transportes de UGT, Eduardo Hernández, aseguró a este periódico que “Fenadismer tiene el mismo derecho a estar en la mesa que Lógica, ya que dentro de los autónomos hay muchos que tienen asalariados”. Hernández, en este sentido, hizo hincapié en la necesidad de abordar un convenio específico para los operadores logísticos y reiteró que “es un disparate su inclusión en las negociaciones de un acuerdo sobre transporte por carretera”.