El transportista navarro incorpora el primer Volvo FH Electric de los cinco previstos para este año, y ultima emplear biocombustible HVO 100 entre sus 250 vehículos pesados.
Lodisna ha dado el pistoletazo de salida a la puesta en marcha de su primer camión eléctrico, dentro de las líneas de trabajo trazadas para avanzar en la descarbonización de su flota propia de 250 vehículos pesados. El operador navarro ha adquirido una cabeza tractora Volvo FH Electric, para realizar diariamente la ruta entre Madrid y Zaragoza, transportando mercancía textil sin emisiones.
La compañía, especializada en servicios internacionales urgentes de carga completa con doble conductor, multiplicará su arranque en vehículo pesado eléctrico para disponer, este año, de unas cinco unidades, también de Volvo.
Sin embargo, la entrada del operador navarro en electromovilidad se produjo a finales de 2022, con la diversificación de su negocio, a través de la distribución de última milla. Esta actividad, iniciada en Pamplona, se realiza con una flota eléctrica de cinco furgonetas y motocarros.
Lodisna trabaja con Volvo, que concentra un 90 por ciento de su flota pesada, para incorporar en las próximas semanas biocombustible HVO 100 en sus rutas internacionales. Entre las ventajas del aceite vegetal hidrotratado es que permite su suministro a las cabezas tractoras Euro 6 sin realizar modificaciones mecánicas de ningún tipo.
El operador, que en el último año reforzó su flota añadiendo unas 50 cabezas tractoras, también ultima poner en funcionamiento sus dos primeros duotrailer en rutas nacionales.
Otras iniciativas en marcha para disminuir las emisiones de CO2, que se suman a la continua renovación de la flota y al uso de neumáticos de baja resistencia a la rodadura, se centran en introducir un simulador de camión para reforzar la formación en eco-conducción, así como en el desarrollo de herramientas avanzadas para optimizar la planificación y reducir los kilómetros de vacío, empleando tecnologías de geoposicionamiento e inteligencia artificial.
Por otra parte, Lodisna ha constituido, recientemente, una filial en Tánger (Marruecos), que operará a finales de este año con una flota propia formada por una decena de camiones. La nueva sociedad se suma a la de Lodisna France, abierta en 2012 con sede en Mouguerre, cerca de la frontera española.
La compañía, con sede en la Ciudad del Transporte de Pamplona, obtuvo en 2021 una cifra de negocio de 34,15 millones de euros, un 7,3 por ciento más que en el ejercicio anterior, según revelan los últimos datos del Registro Mercantil.