Los armadores afrontan una caída en barrena del valor de sus activos

Un petrolero de más de 200.000 Tm de 5 años ha pasado de 165 millones de dólares a valer menos de 90 en apenas 6 meses.

Además del bajón de los fletes, los armadores van a tener que afrontar una caída en barrena del valor de sus activos. Por ejemplo, un petrolero de más de 200.000 tpm de 5 años costaba 165 millones de dólares hace apenas seis meses, más que uno nuevo. Hoy, no vale más de 90 millones y su precio seguirá bajando

Para ver lo dura que va a ser la caída a la que se enfrentan los armadores, o el “super desplome” que dice el gurú Stopford, conviene saber cómo evolucionaron los ingresos por fletes y el precio de los barcos de segunda mano en el período 1980-2009. La década de los 80 “consistió en un largo periodo de fletes bajos (1982- 87). El índice Clarksea cayó hasta 5.000 dólares/día, un nivel suficiente para cubrir los costes operativos, pero no los costes de capital. A medida que la liquidez iba desapareciendo del sector, los buques empezaron a venderse a precios bajísimos (ver cuadro adjunto).

Los petroleros VLCC modernos se vendieron a 4 millones de dólares y los graneleros panamax por 6 millones. Luego, el mercado se fue recuperando entre 1987 y 1989 hasta alcanzar un pico en 1990. Los precios de los buques de segunda mano se restauraron. Se creó un atractivo mercado de activos en el que los buques se compraban, se explotaban durante unos pocos meses y luego se vendían con beneficio. En 1990, el precio de un granelero Panamax de 5 años de edad era de 22,5 millones de dólares”, explica Stopford. Por su parte, la década de los 90 fue decepcionante. “Los armadores de petroleros esperaban un boom a mediados de esa década, como resultado del final del desguace de los buques excedentes de los 70, pero el pico no llegó hasta 1997 y fue débil y de corta duración.

Los precios de los buques de segunda mano no subieron en este periodo, manteniéndose en general en línea con los valores de sustitución, de modo que los buques de 5 años se vendían típicamente un 25% por debajo de los precios de los buques nuevos”, añade el ejecutivo de Clarkson. En el último ciclo, que llegó con el milenio, el mercado estuvo inesperadamente fuerte. “Empezó con un pico en 2000, con fletes de 24.000 dólares/día, pero esto fue sólo el ensayo general del super boom que se avecinaba. Después de un fuerte y breve descenso, el mercado entró en un periodo de fletes permanentemente al alza, con picos significativos en 2004 y mediados de 2008.

Durante este periodo de casi 5 años, los ingresos por fletes estuvieron muy por encima de los registrados en los 20 años anteriores. La robustez del mercado se reflejó en los precios de los buques usados, que llegaron a superar los de sustitución. Por ejemplo, el precio de un granelero panamax de 5 años alcanzó los 88 millones de dólares en junio de 2008 y el de los petroleros VLCC de 5 años llegó a los 165 millones en agosto de 2008. Pero los precios cayeron abruptamente al colapsarse el comercio en el otoño de 2008”, concluye Stopford.