Los autónomos buscan una salida a la “pérdida de competitividad” por la supresión de los módulos

Aseguran que el ‘pacto fiscal’ para el País Vasco encarecerá el transporte un 12%.

Los transportistas autónomos del País Vasco, agrupados en torno a la Asociación de Transportistas del Puerto de Bilbao (ATAP), el sindicato Hiru, la Federación de Cooperativas del Transporte de Euskadi y la Agrupación Alavesa de Transporte, continúan las negociaciones con los grupos políticos con representación parlamentaria para buscar una salida a la “pérdida de competitividad” provocada por la supresión de los módulos. Tras las recientes reuniones llevadas a cabo con representantes del PSE, PP y Bildu, las citadas organizaciones empresariales tenían previsto, al cierre de esta edición, mantener un encuentro con el PNV el 27 de marzo.

Los transportistas, que reclaman el mantenimiento de los módulos, confían en alcanzar pronto un acuerdo que permita competir en igualdad de condiciones frente a sus colegas del resto de España, que pueden seguir tributando por el sistema de estimación objetiva, fiscalmente más ventajoso que la estimación directa. “Somos conscientes de que existe la posibilidad de que los módulos sean una cosa del pasado y que será complicado dar marcha atrás, pero sí estamos intentando que haya una solución que se acerque lo más posible a la situación anterior, es decir, que no perdamos competitividad”.

A modo de ejemplo, cooperativistas consultados por este periódico aseguraron que con esta mayor carga impositiva “el transporte por carretera podría encarecerse cerca de un 12 por ciento”, lo que en la práctica supondría sacar del mercado a los autónomos residentes en el País Vasco, al no poder competir en precio con el resto de transportistas. Las organizaciones empresariales, en este sentido, se siguen aferrando al acuerdo del año 2000, firmado por el Gobierno vasco, las tres diputaciones y el propio sector, que recogía literalmente que “ningún transportista residente en la Comunidad Autónoma Vasca pagaría más en IRPF que un transportista del resto de España”.

De momento, las espadas siguen en todo lo alto, aunque los transportistas tienen “buenas sensaciones”, tras apuntar que “los grupos políticos se han mostrado receptivos y entienden la delicada situación en la que han colocado al sector con la supresión del sistema de módulos”.