Sus resultados fueron de 15,8 millones frente a los 339 millones de euros de un año antes.
Scania tampoco parece capaz de hacer frente a una crisis financiera y una recesión económica sin precedentes que están llevando a los fabricantes europeos de camiones a tomar medidas urgentes de reducción de costes y a desmantelar buena parte de la capacidad de producción acumulada durante uno de los períodos de bonanza más largos que se recuerdan
El grupo Scania tampoco logra escapar a la actual coyuntura económica y se ha visto obligado a tomar medidas urgentes para hacer frente a la crisis. En efecto, el fabricante sueco de camiones registró en el primer trimestre del año unos resultados financieros peores de los previstos, con unos beneficios antes de impuestos de 164 millones de coronas suecas (unos 15,8 millones de euros) que representan un descenso de nada menos que el 95 por ciento con respecto a los 3.520 millones de coronas (unos 339 milloones de euros) registrados en el mismo período de 2008.
La facturación bajó a 15.900 millones de coronas, frente a los 22.000 millones conseguidos en el primer trimestre del pasado ejercicio. Desde el grupo Scania se ha justificado semejante retroceso alegando que la fuerte reducción del número de vehículos entregados a clientes y la consecuente mucho menor utilización de la capacidad productiva disponible habían superpuesto sus efectos respectivos de reducción de ingresos y aumento de costes, perjudicando mucho a las cuentas del fabricante sueco. “Prácticamente todos los mercados en que Scania está presente han mostrado en estos primeros tes meses de 2009 un nivel muy bajo de actividad económica debido a la turbulencia de los mercados financieros y su impacto en la economía real”, explicaba Leif Östling, presidente ejecutivo de la compañía al presentar sus resultados financieros a los medios de comunicación.
Östling añadió que la previsión hecha por Leif Johansson, su tocayo y rival más directo, ya que Johansson es presidente del grupo Volvo, en el sentido de que la demanda europea de camiones se va a reducir más de un 50 por ciento en el año 2009 con relación a 2008 no le parecía exagerada y añadió que la caída de la demanda de estos vehículos en Europa del Este, incluyendo Rusia y Ucrania, sería peor, alcanzando de un 70 a un 75 por ciento durante 2009. Por el momento, Östling no ve que vayan a registrarse cambios importantes en la tendencia de la demanda de camiones en trimestres próximos.
El fabricante sueco de camiones ya había anunciado reducciones de plantilla en meses previos, siendo ya casi 2.000 los contratos temporales no renovados al alcanzar su fecha de expiración. También se han eliminado los turnos nocturnos, reduciéndose el personal de planta a sólo 10.000 personas, y se pretende rebajar aún más la capacidad de producción, negociando con los sindicatos una semana laboral de sólo cuatro jornadas durante un tiempo que podría oscilar entre 6 meses y un año. Este recorte de la semana laboral tendrá un efecto equivalente al despido de 1.000 empleados pero será mucho menos traumático, al repartirse sus efectos sobre toda la plantilla actual del grupo sueco.