La carretera centra el 70% de los procedimientos judiciales con especial incidencia en carga completa, contenedores y frigoríficos, mientras la crisis también llega al marítimo.
Los procedimientos concursales en el sector del transporte han crecido un 26% durante 2010, atrapando a un total de 125 empresas, de las que un 70% son de transporte por carretera. La crisis, que entró en 2010 en el transporte marítimo, sigue azotando a los subsectores de carga completa, contenedores y frigoríficos, los más afectados
Los procedimientos concursales (antigua suspensión de pagos) para hacer frente a las insolvencias empresariales en el sector del transporte y la logística crecieron un 26 por ciento a lo largo de 2010 respecto al ejercicio 2009. En concreto, los concursos atraparon en 2010 a 125 compañías de transporte de mercancías frente a las 99 suspensas de 2009, según un análisis realizado por este periódico que retrata la incidencia de la crisis en el sector a lo largo de los tres últimos años.
El sector del transporte venía manteniendo desde el último tercio de 2008 una media trimestral por encima de la veintena de expedientes judiciales aprobados hasta el arranque de 2010 donde la media trimestral se duplicó llegando a superar el medio centenar de procedimientos, la cifra más alta de la década. Los juzgados españoles han aprobado un total de 271 concursos en empresas de transporte de mercancías en los últimos tres años de crisis.
El registro alcanzado en 2010 triplica el obtenido en 2008, principio de la actual crisis económico, donde se abrieron un total de 47 procedimientos judiciales. Del análisis numérico de los procedimientos concursales aprobados en los tres últimos años y su evolución trimestral se puede observar (ver cuadro superior) la evolución máxima en la aprobación de concursos en el primer trimestre de 2010, donde se registraron 51 procedimientos, el 40 por ciento de todo el ejercicio 2010, mientras que la evolución del segundo, tercer y cuarto trimestre del ejercicio ofrece una desaceleración en la aprobación de nuevos concursos, pasando a contabilizarse tan sólo 16 procedimientos en el último trimestre, lo que supone un 30 por ciento menos que en el mismo periodo de 2009.
Todo indica que la mayor afectación al sector de la crisis económica ha pasado y que las empresas están recuperando parte de su salud dentro de un ambiente sobre el que aún existe mucha incertidumbre. En relación a las 125 empresas con concursos abiertos durante 2010, estas sociedades registraron en su conjunto un volumen de negocio de 388 millones de euros y contaban con una plantilla de 2.366 trabajadores en el ejercicio 2008, según los últimos datos disponibles en el Registro Mercantil.
El principal origen geográfico de las empresas de transporte y logística con concursos abiertos fueron Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid, con 29, 26 y 20 procedimientos concursales aprobados a lo largo de 2010, respectivamente, suponiendo el 60 por ciento del total de concursos abiertos en España. Les siguen Andalucía, Baleares y País Vasco, con ocho, ocho y cinco concursos, respectivamente. Destaca un mayor desarrollo de concursos en la Comunidad de Madrid, duplicando el número de casos, mientras que Cataluña y Comunidad Valenciana registran crecimientos menores en el número de procedimientos aprobados.
LA CARRETERA, LA MÁS AFECTADA
Entre los 125 expedientes abiertos vuelve a quedar comprobado que el sector que más ha sufrido las consecuencias de la crisis es la carretera, donde un total de 91 empresas se han visto obligadas a presentar concurso de acreedores ante el juzgado, lo que supone el 72 por ciento de todas las insolvencias aceptadas en el transporte y la logística en España en 2010. El número de concursos en la carretera creció un 6 por ciento respecto al número de procedimientos generados en 2009 que fue de 86 expedientes.
Dentro de los concursos del transporte por carretera, el mayor número de expedientes afectan al nicho de la carga completa, un 46 por ciento de las 91 suspensas, mientras que el 12 por ciento son empresas de transporte frigorífico, un 8 por ciento de transporte de contenedores, otro 8 por ciento son empresas de transportes especiales y grúas y un 7 por ciento son agencias de transporte. El resto de subsectores como mudanzas, paquetería industrial y courier o transitarios de terrestre son los menos afectados. La facturación afectada por la suspensión de actividades en las empresas de transporte por carretera con procedimientos concursales abiertos en 2010 asciende a 294 millones de euros, el 75 por ciento del total de empresas concursadas analizadas, mientras que el empleo afectado en la carretera asciende a 1.854 trabajadores, el 78 por ciento de los empleos del total de la muestra analizada.
LA CRISIS EN EL SECTOR MARÍTIMO
Por su parte, hay que destacar el fuerte auge de los procedimientos concursales en el seno del sector marítimo y su poca incidencia en la logística o la carga aérea. De los 125 procedimientos concursales, treinta casos afectaron a empresas de transporte marítimo, mientras que la logística, con tres casos y la carga aérea, con un único concurso el de la mercantil Taxi Fly Group (Pronair Airlines), completan la lista negra de 2010. La progresión en el número de procedimientos en el mundo marítimo corresponde a insolvencias en navieras, transitarias, consignatarias y sociedades con actividades en los puertos españoles y su área de influencia.
De los únicos seis casos abiertos en el transporte marítimo en 2009 el sector ha pasado a un total de treinta expedientes, lo que ha supuesto quintuplicar el número de empresas afectadas por la crisis económica. En este ámbito del negocio destacan todos los concursos abiertos por sociedades filiales de Grupo Contenemar, así como el procedimiento concursal de la centenaria naviera Trasatlántica, que no pudo superar la última tormenta. Por último, hay que destacar la afección a la crisis económica dentro del sector de transitarios, tanto en el ámbito terrestre como en el marítimo. Entre los casos afectados conviven empresas históricas como Ocomar, Transmallorca o el caso ITS-Barnatrans con el fallido de Bestin Supply Chain.
La crisis pasa factura a los experimentos
Una de las consecuencia de la crisis en el sector del transporte y la logística en España a lo largo del pasado ejercicio fue que con el auge de la tormenta financiera se terminó por pasar factura a los experimentos y a casi todas aquellos inventos empresariales. La crisis ha pasado factura allí donde existía una ausencia de vocación empresarial y una gestión dedicada a fortalecer un negocio de largo recorrido.
Ahí está lo ocurrido con Bestin o con la aerolínea de carga Pronair, por no hablar del desmoronamiento de imperios como el de Contenemar o la última travesía de la naviera Trasatlántica. Está claro quemuchas empresas han sorteado la crisis hasta que la entidad financiera que les sujetaba quiso aguantar. Otros han conseguido mantenerse en elmercado gracias a una refinanciación de sus deudas o reintegrando nuevos capitales para hacer frente al déficit de circulante que aún hoy existe entre las empresas. En el callejón de la crisis hemos asistido al incremento de la morosidad, un problema que sigue poniendo en entredicho nuevas normativas como la Ley de Contrato de Transporte que no ha venido a mejorar los plazos de cobro.
Así las cosas, el sector vive el inicio de un cuarto año de crisis de actividad, con indicadores negativos de la demanda y con bajos precios en el transporte, lo que unido al incremento de los precios del carburante vendrá a reabrir una primavera caliente en el sector del transporte por carretera. Por su parte, en el sector marítimo continúa el ambiente de gestión en niebla, con un ligero aumento de las importaciones en los últimos meses que ha venido a reactivar el sector, que definitivamente necesita una mejoría en las exportaciones.