El acuerdo sellado con Seavided incluye la aplicación de un ERE.
La sociedad de estiba del puerto de Avilés y los estibadores siguen la estela de Málaga y La Luz y sellan un acuerdo hasta finales de año para ajustar los costes de la semipública al actual escenario de recesión de tráficos. Los portuarios asumen una bajada salarial del 20 por ciento y un ERE temporal para evitar despidos y capear la crisis
La brusca caída de la actividad en el puerto de Avilés, que perdió entre enero y abril el 28 por ciento de sus tráficos de carga seca, continúa haciendo mella en la Sociedad Estatal de Estiba y Desestiba (Seavided), que ha cerrado un acuerdo con los portuarios para cortar la sangría de la semipública, con unas pérdidas de 200.000 euros en el acumulado anual hasta mayo, sin necesidad de despedir a ninguno de los 61 estibadores.
El documento, al que ha tenido acceso este periódico, contempla una rebaja en los sueldos de los portuarios de 200 euros mensuales -lo que equivale a un recorte salarial de cerca del 20 por ciento-, la negociación de un sistema de rendimientos y primas de productividad y la aplicación de un ERE rotatorio de suspensión de los contratos hasta finales de año, que se prorrogará automáticamente otros seis meses si el índice de actividad de la sociedad está por debajo del 80 por ciento. El número máximo de días en los que el trabajador estará en desempleo durante dicho período no podrá ser superior a 90 días.
Las empresas, por su parte, se comprometen a complementar la prestación de desempleo hasta el 100 por ciento de la retribución correspondiente a si estando en activo no se le diera trabajo efectivo. Las estibadoras del puerto de Avilés no ocultaron su satisfacción por este acuerdo, similar a los que se han logrado cerrar ya en otras dársenas, como Málaga y La Luz, para capear la crisis, que podría suponer para Seavided un ahorro de 200.000 euros hasta finales de año, según aseguraron fuentes del sector consultadas por este periódico. Y es que la semipública, donde la Autoridad Portuaria ostenta el 51 por ciento del capital, arrastra un déficit de más de 4,4 millones, que las mismas fuentes achacan a la no externalización por parte del puerto de su plan de prejubilaciones en 2004, “como era obligación, con lo que se perdieron al menos un 40 por ciento de subvenciones”.
El origen de este problema se remonta a febrero de 2001, fecha en la que los consejos de administración de las sociedades estatales de estiba de Gijón (Gestiba) y Avilés (Seavided) acuerdan un plan de prejubilaciones. Para su financiación, se fijó un suplemento de 0,04 euros por tonelada movida (conjuntamente por los dos puertos), que entró en vigor en mayo de 2002. En 2004, Gijón externaliza su plan de empleo y aplica la recaudación del suplemento por tonelada exclusivamente para Gestiba. “Avilés, sin embargo, no movió ficha”, denuncian las mismas fuentes.
Así las cosas, al cierre de 2008 -como ya ocurriera desde 2004- no aparece provisión para el plan de empleo y sí una deuda de más de 3,7 millones por este concepto. Ahora se ha firmado un préstamo con La Caixa, avalado por algunas empresas, para cubrir el plan de empleo. Para su financiación, a diez años, se aplicará un suplemento de 0,09 euros por tonelada.