Dieter Zetsche, presidente de la asociación de constructores europeos de automóviles (ACEA) y presidente ejecutivo del grupo Daimler, ha advertido de que la industria europea del motor no espera una rápida recuperación durante este año y señaló que las ventas de vehículos industriales, que siguen de cerca la evolución del ciclo económico, lo más que llegarán es a tocar fondo y mantenerse en los niveles de 2009, año en que se redujeron en un tercio respecto a 2008.
“Si aparentemente la economía parece ir mejor en 2010 es porque comparamos sus índices con los de 2009, de ahí que sea muy importante no dejarse llevar por el optimismo ante cualquier indicio que refleje una cierta recuperación económica”, señaló el presidente de ACEA. Zetsche subrayó la importancia de la industria del automóvil como motor económico, señalando que de ella salen el 35 por ciento del empleo industrial en Europa y cerca de 380.000 millones en impuestos para las arcas estatales.
Refiriéndose a la posibilidad de unas normas mucho más restrictivas de las emisiones de CO2 de los vehículos industriales, Zetsche comentó que no es el mejor momento, ya que durante el año pasado se contrajeron las ventas de vehículos comerciales nuevos a sólo 1,71 millones de unidades. “La legislación debe ser, ante todo, razonable y el objetivo de limitar a sólo 135 gramos de CO2 por kilómetro las emisiones de los vehículos comerciales ligeros a partir de 2020, sencillamente no es razonable”, dijo el presidente de ACEA.
La carga de pesimismo que llevan las declaraciones de Zetsche sobre el futuro de las ventas de vehículos industriales contrasta con otras de las que este periódico se hizo eco, formuladas por Leif Johansson, presidente ejecutivo de Volvo y, a la vez, presidente de la división de vehículos industriales de ACEA. En ellas, se afirmaba que la demanda europea de camiones iba a crecer un 10 por ciento este año.
Por otro lado, desde ACEA se ha expresado la profunda preocupación de los constructores de automóviles por el fuerte incremento que han experimentado últimamente los precios de los minerales de hierro, claves para la producción de acero. Según se indica desde ACEA, los principales exportadores de minerales férricos acaban de anunciar su intención de ir elevando el precio de éstos hasta ponerle más de un 80 por ciento más caro que el precio actual.
Desde ACEA se advierte de que una política de precios tan excesiva e impredecible afectará muy negativamente a la competitividad de la industria europea, ya que “los fabricantes de automóviles necesitan materias primas que tengan un precio accesible y competitivo”.