No obstante, la situación financiera saneada del enclave “permitirá aguantar el golpe”, señaló Mercè Conesa, manteniendo el plan de inversiones y adoptando medidas de choque.
La Autoridad Portuaria de Barcelona prevé que su cifra de negocio baje el 17 por ciento en 2020 como consecuencia de la caída de tráficos provocada por la pandemia, pasando de 172,43 millones de euros de facturación en 2019 a los 143,57 millones este ejercicio.
El resultado de explotación descenderá de los 40,21 millones de euros a los 14,69 millones, es decir, el 63 por ciento menos. No obstante, la situación económica saneada del enclave, que tiene “un endeudamiento del 12 por ciento y un remanente de tesorería positivo, nos permitirá aguantar el golpe”, señaló ayer Mercè Conesa, presidenta de la Autoridad Portuaria, en una conferencia online del Cercle d’Infraestructures.
A pesar del descenso de los ingresos, la responsable portuaria recordó que el organismo mantiene los 71 millones de euros de inversión pública prevista para este ejercicio, además de poner en marcha el plan de choque para mitigar el impacto de la crisis en la comunidad portuaria y sus clientes finales, evaluado en 56 millones de euros. “La inversión no puede aflojar, menos en un momento como el actual”, apuntó Mercè Conesa. Los responsables portuarios prevén que la recuperación de tráficos será lenta y “no se normalizará en su totalidad, como en 2019, hasta 2023”.
El plan para recuperar tráficos, consensuado por la comunidad portuaria, pasa por “detectar nuevas oportunidades impulsando la innovación”, así como reforzar el hinterland, fortalecer las relaciones con Asia y desarrollar suelo logístico. La pandemia no cambia los objetivos estratégicos del puerto de Barcelona, al contrario, incentiva más la apuesta por la innovación, la implantación de la tecnología 5G, que estará desplegada en 2023, y por las medidas para reducir el impacto ambiental en la actividad portuaria.
En cuanto a los pendientes accesos terrestres, Conesa señaló que hay “consenso técnico sobre la mejor opción”. Es más, “está a punto” la firma del protocolo por parte de las administraciones afectadas para tirar adelante el proyecto, paralizada por la pandemia. Sobre la celebración de la segunda edición del foro ‘Smart Ports. Piers of the Future”, el próximo otoño, el puerto catalán, junto con las otras instalaciones portuarias que participaron en la primera experiencia, “estamos trabajando en alternativas, pero no podemos avanzar en estos momentos ninguna decisión”.