Las compañías navieras de transporte de contenedores reducirán la capacidad de carga del mercado para mantener o elevar el precio del flete y se apoyarán en los pequeños buques.
En 2019 varios analistas del mercado del transporte de contenedores auguraban buenas cifras para el sector, con ascensos continuados durante, al menos, cuatro años. La crisis sanitaria y económica ha cambiado el panorama por completo y los armadores y transportistas han debido replantearse el futuro inmediato.
Uno de los primeros cambios que se han producido en el sector es el replanteamiento sobre la construcción de buques cada vez mayores que portan, en definitiva, una enorme capacidad de carga, cuando la demanda se ha reducido radicalmente e implica un riesgo muy grande para las empresas en un mercado muy volátil. Se prevé que la situación se recuperará progresivamente y, muy probablemente, con un replanteamiento logístico por parte de los cargadores.
A pesar de ello, hay una cartera importante de grandes megabuques en construcción en los astilleros y durante 2020 se entregarán 30 portacontenedores, 26 en 2021 y 20 más en 2022. Todos ellos de más de 20.000 TEUs de capacidad. HMM, MSC, OOCL y Cosco son las cuatro grandes navieras que han estado pujando en los últimos años en la carrera por encargar los buques más grandes de la tierra, con capacidades entre los 21.000 y los 24.000 TEUs. Y estos cuatro grandes, entre otros, ahora se replantean su política comercial para los próximos años.
Mientras, el precio del flete se ha disparado porque los grandes transportistas han retirado capacidad de carga del mercado o han mantenido los viajes en vacío o reduciendo escalas. La línea entre Shanghái y la costa este de Estados Unidos se acerca a los 3.000 dólares (unos 2.664 euros), como ya lo hizo en el mes de enero. Por su parte, la ruta con la otra costa estadounidense es la que más ha subido proporcionalmente (un 50 por ciento desde junio de 2019) y el flete supera ampliamente los 2.000 dólares.
Según Xeneta, una empresa de evaluación en el mercado marítimo de contenedores, las fluctuaciones de precios han hecho variar tanto los fletes que no se puede programar a medio plazo un envío de manera sostenida o continuada. Según este analista, “la industria de los portacontenedores necesita estabilidad, como el establecimiento de precios comunes para productos básicos en todas las empresas”.
Según distintos expertos, la tendencia de reducción de capacidad de carga se mantendrá durante 2020 para sostener los precios al alza o estables, mientras se observa la evolución de la crisis. El siguiente paso será el replanteamiento logístico de los grandes porteadores que, muy probablemente, se apoyarán en los transportistas de menor recorrido para intercambiar cargas o chartearán buques de pequeña capacidad para destinos específicos.
Más información en la próxima edición del especial ‘TOP 200 Puertos de Contenedores del Mundo’ de TRANSPORTE XXI.