Los sindicatos holandeses han rechazado la propuesta de reestructuración de la firma de transporte urgente y operador postal TNT. El operador ofrecía una reducción salarial del 15 por ciento. TNT defiende la necesidad del recorte, con el argumento de que su plan aseguraría el empleo por seis años más en un entorno de mercado mucho más competitivo. La empresa señala que prácticamente todos los operadores postales públicos se enfrentan a un negocio en declive, con pérdida del correo tradicional a favor del correo electrónico.
TNT advierte que de no llevar a cabo medidas radicales de ahorro de costes, hasta 11.000 trabajadores corren peligro de perder su empleo. A pesar de este panorama, TNT sigue siendo el candidato principal para adquirir una participación en el correo británico Royal Mail. Deutsche Post World Net ha declarado recientemente que no está interesada en la operación por “carecer de valor estratégico”, aunque lo cierto es que la empresa pública alemana atraviesa sus propios problemas, con numerosas voces pidiendo la escisión de la compañía para recuperar la rentabilidad perdida.
Los sindicatos del correo británico también rechazan la venta de acciones, si bien la dirección de la empresa defiende que no se trata de una venta, sino más bien de una alianza estratégica. Lord Mandelson, ejecutivo a cargo de la operación, señala que el servicio postal seguirá bajo la administración pública, y que ninguna empresa podría en la recesión actual pagar el precio del 100 por cien de la compañía británica.