La naviera danesa anuncia un aumento de sus tarifas de 50 dólares por contenedor de 20 pies en las rutas Europa-Asia.
En base al deterioro de los precios y el descenso de los volúmenes, los analistas financieros predicen que Maersk podría perder cerca de 851 millones de euros en 2009. Por su parte, Maersk asegura que los volúmenes están creciendo, pero las tarifas no, y aprovecha la ocasión para aumentar sus precios entre Europa y Asia
Los analistas financieros pronostican una pérdida neta para Maersk Line de 851 millones de euros en el ejercicio 2009, según recoge el diario belga ‘Le Lloyd’. Si a esto le añadimos el descenso de los precios del petróleo, habría que revisar la previsión de resultados del grupo AP Moller de los 1.083 millones de euros señalados hace dos meses a 512 millones. Los analistas se basan en que el 40 por ciento de la actividad de transporte marítimo de Maersk se concentra en las rutas entre Asia y Europa, y que estas rutas sufren actualmente una caída en picado de tarifas y volúmenes. Actualmente el armador se esfuerza en reducir al mínimo sus costes de explotación, lo que no ha dado todos los resultados deseados.
Por ejemplo, la naviera se ha planteado medidas extremas, como por ejemplo abandonar el puerto de Charleston si no se le permite recurrir a estibadores no sindicalizados. Parece que de momento ha conseguido que la Autoridad Portuaria le permita mudarse a una terminal “pública” en la que no trabajan estos estibadores. En Asia, y en particular en China, la naviera se enfrenta a las quejas de los cargadores que protestan contra el aumento de las tarifas de uso de terminales (THC) en la mayoría de los servicios. Desde el pasado 15 de enero, los THC para contenedores tanto en tráficos de exportación como de importación, en puertos chinos y mongoles, han aumentado entre un 28 y un 34 por ciento, pasando de 370 a 475 yuanes para un contenedor de 20 pies, y de 560 a 750 yuanes para uno de 40 pies.
Las asociaciones de cargadores reclaman que los THC forman parte de las tarifas generales de carga, y que por principio no deben ser presentadas por separado a los clientes, como de hecho han decretado las autoridades chinas. Se trataría por tanto de un disfraz para compensar la caída de las tarifas generales. Por su parte, Maersk defiende que las THC se calculan en base a los precios impuestos por los operadores de las terminales y por las condiciones del mercado local. De hecho, esta no es la única medida que Maersk esgrime contra la crisis.
La naviera danesa ha anunciado recientemente el aumento de sus tarifas en 50 dólares por TEU en las rutas desde Europa hacia Asia. El armador señala que “debido al nivel insostenible de las tarifas, y al aumento de la demanda”, incrementará sus precios en 25 dólares por TEU el 1 de marzo, y 25 dólares más el 1 de abril. Maersk afirma que está registrando una progresión de la demanda debido al debilitamiento de la libra esterlina y del euro. Asimismo, Maersk anunció el reforzamiento de su servicio South Atlantic Express (SAE), que conecta los Estados Unidos con Centroamérica, con la inclusión de escalas en los puertos de Savannah y Wilmington. La nueva rotación a partir del 5 de marzo será la siguiente: Savannah, Wilmington, Norfolk, Miami, Puerto Cortés (Honduras) y Santo Tomás (Guatemala). La naviera excluye el puerto de Charleston del servicio.