Maersk Line y su empresa hermana Safmarine transferirán todos sus servicios feeder a una nueva compañía a partir del tercer trimestre de 2011. Eivind Kolding, director general de Maersk Line, señala que “actualmente nuestra parte de mercado en el feeder europeo es del 6 por ciento. Nuestra intención es duplicarla e incluso alcanzar el 15 por ciento”. La decisión tiene un buen argumento a favor en el éxito de MCC Transport, una filial de Maersk que está obteniendo un buen éxito en las rutas feeder asiáticas.
La nueva compañía aún no tiene nombre, pero tendrá su sede en Copenhague, en el mismo edificio que Maersk Line. Su flota se compondrá de buques fletados y tendrá acceso total a los equipos e infraestructuras de manutención del grupo escandinavo y más concretamente al pool de contenedores reefer de Maersk. Este úlitmo aspecto es esencial para el desarrollo de la nueva empresa, ya que Europa es el quinto mercado mundial del transporte marítimo de contenedores reefer.
Los primeros contactos comerciales de la nueva empresa serán en noviembre, coincidiendo con el lanzamiento de la marca de la nueva compañía. El armador danés explota los servicios Euromed, Scanmed, y desde hace poco el Eurolev hacia el Mediterráneo, así como varios servicios regulares en el Báltico. Para Maersk Line, y por extensión para Sagmarine, la operación supone un retorno al mercado europeo como compañías armadoras intraeuropeas.
Safmarine vendió en agosto de 2008 el operador short sea Portlink a la compañia belga Delphis. Esta compañía desarrollaba la mayor parte de sus servicios entre Amberes, Rotterdam y Felixstowe por un lado, y en la península ibérica por otro. Anteriormente, Maersk también había vendido las actividades feeder de Norfolkline a DFDS.
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