El grupo alemán alcanzó unos ingresos de 10.491 millones en los nueve primeros meses de este año, con un crecimiento del 20%.
El grupo germano MAN ha acumulado una facturación de 10.491 millones en los nueve primeros meses del año, con un crecimiento del 20 por ciento. Del total, 7.563 millones proceden del área de vehículos industriales y el resto de la fabricación de motores y otras actividades menos importantes. Los ingresos derivados de los vehículos industriales suponen un avance del 34 por ciento con relación a los tres primeros trimestres de 2009, aunque según Georg Pachta-Reyhofen, presidente ejecutivo del grupo, los mercados internacionales se recuperan con mucha lentitud de la reciente crisis y, lo que es peor, el ritmo de crecimiento se está debilitando en los últimos meses.
No obstante, reconoció que la recuperación en Europa estaba siendo más rápida de lo esperado y descartó que el mercado de los vehículos industriales fuese a afrontar una crisis en ‘W’ con un nuevo hundimiento de la demanda tras unos meses de recuperación. “Hay que tener presente que la demanda de camiones se vió fuertemente golpeada por la crisis económica y que durante 2009 vimos como nuestra producción bajaba de un 50 a un 60 por ciento.
Por eso, tenemos todavía un largo camino por delante hasta recuperar los niveles de ventas y fabricación previos a la crisis”, dijo Pachta-Reyhofen durante la presentación de los resultados financieros de su grupo en el tercer trimestre. En términos de beneficios operativos antes de impuestos, las cuentas de MAN alcanzaron 541 millones hasta septiembre frente a los 155 millones del mismo período de 2009.
Los beneficios netos han sido de 380 millones en los tres primeros trimestres de 2010, frente a los 214 del mismo plazo de 2009. La recuperación del mercado chino de vehículos industriales está favoreciendo a MAN, que mantiene una sociedad conjunta en ese mercado con Sinotruck, un constructor local de camiones. A través de su filial MAN Latino América y de los camiones Volkswagen, la compañía está sacando también un gran partido de la favorable evolución de las ventas en Brasil, donde pronto se empezarán a vender también algunos modelos de la propia MAN.
La compañía asegura liderar el segmento de camiones de más de 5 toneladas del mercado brasileño y cree que en 2010 podría vender de 60.000 a 65.000 unidades en este mercado, muy por encima de las 10.000 estimadas para Europa. Como ya le ocurriera a Volvo, los resultados financieros de MAN no han satisfecho demasiado a los inversores, deseosos de lograr una rápida recuperación de las fuertes pérdidas que algunos de ellos han tenido que afrontar en los dos años últimos, sobre todo en 2009.