La ‘ecotasa’ ha vuelto a poner sobre la mesa la endeblez y falta de sintonía del Ejecutivo de Zapatero, que avanza a impulsos y sin rumbo fijo. Tras anunciar a bombo y platillo el titular de Fomento y número dos del PSOE, José Blanco, el establecimiento de una ‘tasa verde’ sobre el combustible en la Ley de Economía Sostenible, similar a la que aplicará el Ejecutivo de Sarkozy, ahora la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, dice que no. Sin duda, las fuertes críticas que ha generado el anuncio de Blanco ha provocado que este nuevo ‘globo sonda’ del Gobierno empiece a deshincharse poco a poco.
Algunos dirigentes socialistas han entonado el ‘mea culpa’ y achacan el problema a un error de comunicación. Pero lo cierto es que el Ejecutivo ha tenido que dar marcha atrás y sigue trabajando en la Ley de Economía Sostenible, cuya aprobación el presidente Zapatero anunció para el 16 de octubre. Uno de los sectores más críticos fue el transporte por carretera, que continúa su travesía por el desierto y está para pocas bromas.
Tras poner el grito en el cielo, recordó al Ejecutivo que cualquier nueva imposición sobre el combustible rompería los acuerdos de junio firmados con el Comité Nacional en el marco de un enésimo paro, ratificados por el Consejo de Ministros.
Un aviso para navegantes en toda regla. Y es que, ahora no toca. A lo mejor, hace años, en época de vacas gordas, el Gobierno podría haber aprovechado el tirón para subir la fiscalidad y acercarse al umbral europeo, pero ahora, con la que está cayendo, esta medida habría sido la puntilla para el sector.