Las futuras alianzas navieras supondrán una mutación de clientes entre terminalistas, así como oportunidades de inversión para la entrada en el mercado de nuevos actores
Las futuras alianzas navieras que se pondrán en marcha en la primavera de 2017 supondrán una mutación de clientes entre terminalistas de los puertos españoles, abriendo oportunidades de inversión para el abordaje por nuevos jugadores. La rebaja del coste de la estiba será clave para lograr nuevos tráficos de tránsito en los muelles españoles.