Nátura Energía Renovables, del grupo manchego Jiménez Belinchón, renuncia a la construcción de una planta de biodiésel en el puerto de Gijón, cuya primera piedra se colocó en septiembre de 2007 y que preveía un tráfico anual de 400.000 toneladas para una producción inicial de 250.000 toneladas.
El grupo atribuye el abandono del proyecto a la “grave crisis económica”, que ha conllevado problemas de financiación, “al mal momento que atraviesan los biocombustibles, a la subida del precio de los aceites vegetales y a la tardanza de la normativa para potenciar al sector”. La nueva instalación iba a ocupar una parcela de 28.000 metros cuadrados en los muelles de La Osa.