La sociedad foral Nasuvinsa sigue con el desarrollo del proyecto modificado que permitirá acoger una planta de residuos urbanos, que es rechazada por las patronales del transporte Anet y Tradisna.
El Gobierno de Navarra sigue avanzando en el desarrollo de la cuarta fase de la Ciudad del Transporte de Pamplona (CTP), que tras su última modificación, aprobada el pasado 27 de diciembre de 2019, contempla acoger una planta de tratamiento de residuos urbanos. Esta instalación ha generado el rechazo de las patronales de transporte Anet y Tradisna al considerar que “supondrá trabas a la implantación de nuevos operadores y hará que el precio del terreno se deprecie”.
La sociedad foral navarra de Suelo y Vivienda (Nasuvinsa) ha sacado a concurso los contratos de asistencia técnica a la dirección de obra de urbanización de la cuarta fase de la CTP, así como los de movimientos de tierras e integración ambiental y de ejecución de su red viaria e infraestructuras. Estos tres trabajos suman un valor en licitación que supera los 8,1 millones de euros.
La nueva ampliación del complejo navarro del transporte, emplazado en la localidad de Imárcoain del municipio de Noáin, se extenderá sobre 419.338 metros cuadrados.
Nasuvinsa justifica la reordenación de la cuarta fase “en la necesidad de dar cabida a actividades de tipo logístico en gran parcela, mayores de 25.000 metros cuadrados, con un uso tolerable para equipamientos e infraestructuras en un 40 por ciento de su superficie”.
La modificación del proyecto de la cuarta fase del CTP, además de la implantación de la planta de residuos, también supone la desaparición del proyecto de una terminal ferroviaria sobre una extensión de 65.648 metros cuadrados. La argumentación para este cambio es su cercanía a la Terminal Intermodal de Noáin (TIN), gestionada por Hutchison Logistics, así como por la demanda prevista y las limitaciones operativas y técnicas del complejo que se contemplaba en la CTP.