Navistar, el atribulado constructor estadounidense de camiones que recientemente vio como su cotización se derrumbaba en bolsa debido a los malos resultados de su segundo trimestre fiscal, en el que registró unas pérdidas netas de 374 millones de dólares, más del doble de las sufridas en el mismo período del año previo, ha visto como la aceptación de más presencia en su consejo directivo del núcleo duro de su accionariado, formado por Carl Icahn y Mark Rachesky, ha recuperado el valor bursátil de las acciones de la compañía al mejor nivel de los dos meses previos.
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