Navistar obtuvo en 2008 unos beneficios netos de 98 millones de euros

En un mercado que se contrajo un 50%, los vehículos militares salvaron a la compañía.

Navistar International, el fabricante estadounidense de vehículos industriales, consiguió unos beneficios netos de 134 millones de dólares (unos 98 millones de euros) en su último ejercicio fiscal, cerrado el 31 de octubre de 2008, frente a las pérdidas de 103 millones de dólares (unos 75,2 millones de euros) que arrojó el balance del ejercicio anterior.

El resultado de 2008 se ha visto perjudicado por una carga extraordinaria de 422 millones de dólares derivada del descenso del negocio de venta de motores Diesel a Ford, compañía esta última con la que Navistar mantiene un litigio que dura ya casi dos años y que es en gran medida responsable de que las entregas de motores Navistar se hayan reducido un 15 por ciento en el último ejercicio fiscal con respecto al anterior, quedando en sólo 345.500 unidades. Navistar registró un volumen de negocios de 14.700 millones de dólares, un 19,5 por ciento más que en el ejercicio fiscal precedente, pese a la difícil situación que atraviesa el mercado norteamericano de camiones desde que, a comienzos de 2007, entraron en vigor nuevas normas sobre limitación de emisiones contaminantes.

Esta circunstancia adelantó una demanda importante de camiones, debido a que los transportistas prefirieron renovar sus flotas con los vehículos propulsados por motores conformes a la normativa anterior, que eran sensiblemente más baratos. A mediados de 2007, la cosa se complicó al estallar la crisis en el sector inmobiliario de EEUU y también en el ámbito financiero, con las tristemente célebres hipotecas de alto riesgo o hipotecas basura, con lo que todas las expectativas de recuperación de la demanda de camiones se vieron defraudadas. Al agravarse en 2008 la situación económica, las ventas de camiones se han reducido a niveles que nadie había previsto. Ustian subrayó a este respecto que el mercado norteamericano de camiones en los segmentos en que se desenvuelve Navistar (clases 6 a 8, o de 8.846 kilos de peso total con carga en adelante) alcanzó en el ejercicio fiscal 2008 la cifra de 244.100 unidades vendidas, frente a las 319.000 del año fiscal previo.

“El volumen de ventas en 2008 fue casi la mitad de lo que se había registrado dos ejercicios antes y muy inferior a los vaticinios más pesimistas”, indicó Ustian, que añadió que 2008 ha sido el peor de los últimos 30 años en ventas de camiones pesados. Navistar se ha visto algo menos perjudicada que sus competidores porque está presente en más segmentos de tonelaje que algunos de ellos y porque asimismo está muy introducida en el mercado del material militar de transporte. Daniel Ustian, presidente ejecutivo de la compañía, así lo reconocía al comentar los resultados financieros de Navistar, que también subrayaba el lanzamiento de la nueva gama ProStar de camiones pesados, cuyo reducido consumo de combustible ha sido muy valorado en unos momentos en que el precio del petróleo y sus derivados había alcanzado máximos históricos.

También la fabricación de motores en Suramérica ha supuesto una aportación positiva a los resultados de Navistar. La compañía ha ido absorbiendo con el transcurso de los años otras firmas que fabricaban motores Diesel en Brasil. Primero fue Iochpe-Maxion y luego MWM. No obstante, no todo es felicidad en Navistar, ya que en el último trimestre del año fiscal se registraron pérdidas de 343 millones de dólares, frente a los 103 millones que perdió en el mismo período de 2007.