Nissan podría estar planeando un nuevo ERE para 300 de los 650 empleados de su fábrica de vehículos industriales de tonelajes ligero y medio en Ávila, lo que ha desatado los temores de que la subsidiaria española del constructor japonés esté planteándose la posibilidad de cerrar dicha planta, ante el descenso de su producción de estos vehículos, que llegó a rozar las 27.000 unidades fabricadas por año pero que en la actualidad se encuentra en sólo 11.000, sin que haya visos de una posible recuperación.
En la planta de Ávila se construyen los modelos Cabstar y Atleon, haciéndose también allí unidades del primero de ambos que son comercializadas con el nombre Maxity a través de las redes comerciales de Volvo Trucks y Renault Trucks en algunos países europeos. Alfredo Castaño, responsable de comunicación industrial y laboral, ha desmentido que la compañía tenga a la vista ninguna de las dos cosas y ha pedido a los trabajadores abulenses que tengan paciencia hasta que se les presente el proyecto que está preparando Nissan.
La planta de Ávila lleva ya cuatro EREs en apenas dieciocho meses y el actual terminará a finales del presente mes de marzo. A lo largo de esos cuatro EREs, casi toda la plantilla de la planta abulense se ha visto afectada durante un total de 239 días de trabajo.