Su proyecto de construcción de una terminal polivalente para el puerto de Sagunto, con una inversión global de 50 millones de euros, está basado en una instalación baja en carbono con materiales reciclados.
La joint venture formada por las empresas Noatum Terminals, Algeposa Inversiones y Boluda Lines impulsará una terminal polivalente en el puerto de Sagunto basada en la economía circular. El proyecto de construcción, al que ha tenido acceso Transporte XXI, apuesta por un diseño constructivo caracterizado por reducir la extracción de nuevas materias primas y los impactos derivados de su extracción y producción.
Bajo una inversión global de 50 millones de euros en la obra civil y equipamiento, el grupo busca favorecer la economía circular “con la utilización de elementos de construcción compuestos por materiales reciclados, valorizando residuos que, de otro modo, acabarían en vertedero”. El proyecto de terminal utilizará pavimentos generados con residuos de construcción y demolición triturados, procedentes de plantas de valorización, que se utilizarán como áridos reciclados en la creación de firmes.
Desde el grupo explican que “el hormigón es un material cien por ciento reciclable”, por lo que en la construcción se emplearán hormigones que “procederán de plantas con áridos reciclados” para los pavimentos del área de la explanada de 191.700 metros cuadrados de la futura instalación y para la zona de maniobra del muelle de 15.343 metros cuadrados.
Por otro lado, la instalación contará con una terminal ferroviaria, con una superficie de 29.702 metros cuadrados, cuya construcción también será realizada “con un enfoque de economía circular baja en carbono”.
El grupo explica en su proyecto que “actualmente existe un mercado suficientemente amplio de carriles ferroviarios que permiten proporcionar una segunda vida al material sin perder las condiciones de calidad y funcionalidad exigibles. “El hecho de incorporarlos al diseño de la terminal representa una mejora en la huella ambiental de la infraestructura portuaria, con la consiguiente reducción de gases de efecto invernadero asociada a esta construcción”, detallan.
En cuanto a las instalaciones, el proyecto de terminal polivalente contempla las obras para dotar de carril y electrificación a dos grúas portacontenedores marítimas “de gran eficacia que alcanzan una tasa de disponibilidad de hasta el 99,6 por ciento durante el funcionamiento real en el buque”. La electrificación de las grúas y sus carriles están presupuestados en 0,7 millones de euros.
La UTE formada entre Noatum, Algeposa y Boluda comprometió 24,8 millones a la adquisición de equipamiento, mientras destinaba 25,6 millones de euros a la obra civil.
La superficie dedicada al patio albergará 1.950 huellas de contenedores en siete filas, con la ubicación de instalaciones para 80 reefer. La zona de carga tendrá una superficie de 87.992 metros cuadrados. Junto a ella habrá una zona de 40.179 metros cuadrados habilitada para depósito de contenedores y carga rodada.
Naves logísticas
Por su parte, el proyecto de terminal incluye la construcción de cuatro naves. Tres de ellas, equipadas con vía de ferrocarril y puentes grúa, estarán cerradas y cubiertas, sumando 13.440 metros cuadrados, si bien una cuarta será convencional y estará abierta en tres de sus lados, con 4.480 metros cuadrados cubiertos. Al mismo tiempo, la UTE rehabilitará el almacén existente junto al muelle Centro 2, construido en 2008, con 12.061 metros cuadrados.
Junto a la apuesta por la logística portuaria, el proyecto contiene la construcción de un acceso específico para carga sobredimensionada, con puertas de 20 metros al norte de la instalación, independiente del control de accesos que se ubicará en el sur, con cuatro carriles de entrada y uno de salida, o viceversa, según el interés de la terminal en el momento de la operativa. Con esta medida, “se asegura que la cola de vehículos pesados, en ningún caso, afectará a los viales públicos”.
Compromiso de tráficos
La oferta de la UTE, elegida por la Autoridad Portuaria de Valencia en una licitación a la que también se presentó InterSagunto, filial de Grupo Alonso, implica un compromiso de tráfico marítimo mínimo de un millón de toneladas desde su primer año de actividad y un flujo de 12.000 toneladas por vía ferroviaria, que pasarán a ser de 25.000 toneladas desde el segundo año de actividad. La instalación no pronostica ningún crecimiento de su actividad a partir del quinto año.
La propuesta, que compromete su puesta en marcha en 24 meses, añadirá tráficos de contenedores de Boluda Lines (actualmente opera en la instalación de CSP Spain en Valencia) en Sagunto, junto a Noatum y Algeposa, que ya mantienen una alianza comercial en el puerto de Sagunto, con ArcelorMittal y Grimaldi, como principales clientes.