Nokia reestructurará toda su cadena de suministro para reducir costes. Con el aumento de la competencia de los modelos “smart”, la empresa danesa ha perdido su liderazgo mundial. Nokia vendió un total de 97,87 millones de unidades en el segundo trimestre, mientras que en el mismo periodo del año anterior vendió 111,47 millones de unidades. Su cuota de mercado ha pasado de un 30,3 por ciento a un 22,8 por ciento, con lo que perdió el primer puesto mundial a favor de Apple.
Para empezar, Nokia cerrará la planta de producción de Rumanía a finales de este año. Esta fábrica abrió sus puertas hace solo tres años, después de que la danesa cerrara la fábrica de Bochum (Alemania) mientras defendía que los costes laborales alemanes eran diez veces los de Rumanía. Ahora Nokia cierra Rumanía porque las plantas asiáticas producen mucho más y están más cerca de los mercados más demandantes y de los proveedores.
Asimismo, Nokia rediseñará su cadena de suministro y concentrará sus operaciones en Berlín, Boston y Chicago, para cerrar los centros logísticos de Bonn y Malvern (Pennsylvania). La empresa también analizará el futuro de las plantas de Salo (Finlandia), Komaron (Hungría) y Reynosa (México).