El Gobierno de España se comprometió con la Comisión a establecer un sistema de pago por uso
La Unión Europea sigue dando pasos en su política de pago por uso de carreteras. Recientemente aprobó la Directiva 2022/362 de 24 de febrero de 2022 por la que se modifica la Directiva sobre aplicación de gravámenes a los vehículos por la utilización de determinadas infraestructuras, conocida coloquialmente como Directiva Euroviñeta. La norma no obliga a aplicar peajes, pero establece los criterios en caso de que las Administraciones públicas de los estados miembros quieran hacerlo.
El nuevo texto legislativo incorpora importantes reformas. Es de celebrar que extiende su ámbito de aplicación a los vehículos ligeros y autobuses. Establece también que los sistemas de pago por tiempo (viñetas) deben ir desapareciendo progresivamente, lo que conduce a un escenario futuro en el que se imponga el pago de peajes por distancia. Además de las componentes por infraestructura, contaminación y ruido que definidas en la última versión de la Directiva, incorpora una tasa por emisiones de CO2 variable a lo largo del tiempo en función de la evolución de la eficiencia del parque, y una tasa por congestión aplicable a los tramos que sufran congestión de modo recurrente.
En el contexto de las reformas fiscales necesarias para recibir los fondos del Plan de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea, el Gobierno de España se comprometió con la Comisión a establecer un sistema de pago por uso el primer trimestre de 2023, o sea ahora mismo. No obstante, de acuerdo a noticias aparecidas recientemente en prensa, el gobierno ha decidido aplazar su implantación a 2024, probablemente por el riesgo que una medida como esta tiene en un año electoral. No obstante, la patata cliente sigue en la mesa del gobierno que llegue, sea del signo que sea.
José Manuel Vassallo
josemanuel.vassallo@upm.es