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Pañalon sigue ganando músculo

El grupo compra Cotrato, antigua Cooperativa de Transportes de Tomelloso, y suma 40 cisternas de químico y alimentario para sus filiales Transportes Santos y Felix Food Logistics.

Pañalon, con sede en Villarrobledo (Albacete), sigue avanzando en su estrategia de crecimiento. El grupo vuelve a ganar músculo a través de la adquisición de la Unidad de Negocio de Transporte de Cotrato, sociedad resultante de la reciente transformación en sociedad limitada de la histórica Cooperativa de Transporte de Tomelloso.

La compra, cuyo importe no ha trascendido, se ha articulado a través de las filiales del grupo Transportes Santos y Felix Food Logistics.

Cotrato lleva operando en el sector desde 1965 y está ubicada en Tomelloso (Ciudad Real), donde mantendrá sus oficinas e instalaciones.
Cotrato lleva operando en el sector desde 1965 y está ubicada en Tomelloso (Ciudad Real), donde mantendrá sus oficinas e instalaciones.

En concreto, Transportes Santos ha adquirido el negocio y la actividad de transporte químico e industrial de Cotrato, que cuenta con una flota de 25 cisternas y una cartera de clientes consolidados en el ámbito nacional, con contratos a largo plazo.

Por su parte, Felix Food Logistics se hace con el negocio y la actividad de transporte alimentario de Cotrato, incorporando una flota de 15 cisternas. En esta rama de actividad, Cotrato cuenta con una presencia significativa en la zona de La Mancha y sur peninsular, y ofrece una alta especialización en transporte de alcohol alimentario.

Cotrato lleva operando en el sector desde 1965 y está ubicada en Tomelloso (Ciudad Real), donde mantendrá sus oficinas e instalaciones, según ha revelado Pañalon en un comunicado. El personal se incorpora e integra en su totalidad en la plantilla del grupo. Cotrato alcanzó unos ingresos de explotación de 11,72 millones de euros en 2019, último ejercicio del que existen datos oficiales en el Registro Mercantil.

Desde Pañalon destacan que, con esta primera operación corporativa del año, el grupo da un paso adelante en su estrategia de crecimiento y consolidación sectorial de nicho, “manteniendo el objetivo de continuar siendo actor principal en los sectores donde operamos”.

Sucesión de compras

De hecho, la estrategia de crecimiento inorgánico de Pañalon ha sido intensa en los últimos años. La penúltima operación fue la adquisición en el otoño de 2024 de Silos Mar Menor, con sede en Torre-Pacheco (Murcia), especializada en transporte de productos granulados y pulverulentos y con una flota de 40 conjuntos con cisternas de última generación.

Un poco antes, el pasado verano, Pañalon había ejecutado un acuerdo vinculante de fusión e integración de Transportes Sanmartí en Pañalon Silo Tank, otra de las filiales del grupo, que ha pasado a denominarse Pañalon Sanmartí. Además, también en el negocio del transporte de pulverulentos y granulados sumó en la primavera del pasado año una toma de participación mayoritaria en la portuguesa Adriano Barbosa de Azevedo, que opera en el mercado con el nombre comercial de ABA Transportes.

Por su parte, en su actividad de transporte de cisternas alimentarias, el grupo ha ido sumando en los últimos años las adquisiciones de las firmas Caviny, Otero Trans y el grupo Transportes Felix.

El proceso de concentración de Pañalon viene de lejos. A principios de 2017 se inició con la toma de control de Transportes Santos, especializada en transporte de productos químicos. Unos meses después y a través de su ya filial Transportes Santos, el grupo formalizó la compra de Zozaya Cisternas, también especializada en transporte de productos químicos. Además, el grupo selló la compra del negocio de transportes de líquidos químicos ADR de TCS Trans en 2022.

El grupo Pañalon cerró 2022 con unos ingresos de 197,7 millones de euros y un crecimiento del 17,5 por ciento, según el Libro Blanco de Transporte XXI.