El Gobierno aragonés cree que la aerolínea de carga carece de viabilidad, ya que se prevén pérdidas de dos millones anuales.
Plaza Cargo, el negocio de transporte de mercancías de la aerolínea Plaza Servicios Aéreos, cesó su actividad el 30 de noviembre, sin apenas cumplir los dos años en el mercado. El Gobierno aragonés ha tomado esta decisión al considerar que el negocio de Plaza Cargo carece de viabilidad, pues se esperaban pérdidas anuales de dos millones.
El pasado 30 de noviembre, apenas 21 meses después de ponerse en marcha, cesaba la actividad de Plaza Cargo, la sociedad dedicada a la actividad de carga perteneciente a la aerolínea Plaza Servicios Aéreos. La decisión era tomada tan solo unos días antes por el Gobierno de Aragón, accionista mayoritario de la misma, al recibir informes económicos que anunciaban unas pérdidas mínimas de dos millones de euros anuales en el curso de los próximos ejercicios.
Los responsables aragoneses habían decidido unos días antes intentar reflotar la división de carga de la aerolínea aragonesa mediante la entrada de un nuevo socio en su accionariado, la compañía mallorquina Futura, que ha estado operando los vuelos cargueros entre Zaragoza y Canarias a través de su filial de carga Flyant en las últimas semanas. Sin embargo, la constatación de que las pérdidas se mantendrían en los próximos años precipitó la decisión de cesar la actividad de Plaza Cargo, “al carecer de viabilidad comercial”.
Pérdidas millonarias La Junta General de Plaza Servicios Aéreos celebrada el pasado 8 de noviembre hacía públicas unas pérdidas acumuladas de cinco millones de euros desde la puesta en marcha de su actividad en el mes de febrero del ejercicio 2006. Como consecuencia de estas cifras negativas, la Junta acordó un cambio accionarial en Plaza Servicios Aéreos, si bien el Gobierno aragonés mantendrá su participación mayoritaria del 55 por ciento. En la citada Junta se decidió también la creación de una nueva sociedad destinada al negocio de carga en la que se acordó que participaría en mayoría (70 por ciento) la aerolínea mallorquina Futura.
Sin embargo, Futura presentó unos días después un plan de viabilidad para mantener viva la aerolínea de carga de Plaza, que reflejaba unas pérdidas significativas en el curso de los próximos años, antes de la entrada en números negros y que debería asumir el propio gobierno aragonés. De esta manera, la Administración aragonesa, ante la necesidad de seguir aportando dinero para mantener vivo el negocio de carga aérea, tomó la decisión de abandonar definitivamente el negocio de transporte aéreo de mercancías. Con el añadido de que “en ningún momento se va a plantear la reanudación del mismo”.
Por su parte, fuentes del anterior equipo directivo de Plaza Cargo, consultadas por este periódico han asegurado que “las decisiones se han precipitado en el curso del último mes de noviembre y ha faltado tranquilidad por parte de la Administración aragonesa”. Según las mencionadas fuentes, la actividad de Plaza Cargo ya estaba previsto que registrase pérdidas en los primeros ejercicios, “algo que, por otra parte, es muy previsible al inicio de cualquier actividad en el negocio de la carga aérea”. Pero se trataba de un proyecto “más a largo plazo, que hubiese reportado unos buenos resultados en el curso de unos años.
Era una apuesta de futuro que ahora se ha truncado definitivamente”, lamentan las mencionadas fuentes. Plaza Cargo mantenía desde hace un año una línea regular a través de carguero que unía cinco días por semana Zaragoza y Canarias, para la que utilizaba un avión del fabricante Boeing modelo 727 con capacidad de carga para 22 toneladas y que operaba Swiftair.