Castellón comienza a recuperar tráficos de graneles tras la fuerte caída de 2009 en la que se perdieron dos millones de toneladas.
PortSur ha reducido su capital en cuatro millones de euros para compensar sus pérdidas acumuladas tras arrancar su actividad en 2008 en plena convulsión económica que ha supuesto una fuerte caída en el tráfico de graneles. La terminal de graneles está reactivando el tráfico tras que el puerto perdiera más de dos millones de toneladas en 2009
PortSur, empresa concesionaria de la terminal de graneles sólidos de la dársena sur del puerto de Castellón, ha elevado a público la reducción de su capital social en casi 4 millones de euros (3.889.656 euros) a fin de compensar las pérdidas acumuladas en los últimos ejercicios. La estibadora, que arrancó con su actividad en 2008, disponía de un capital social de 4.856.000 euros desde una ampliación del mismo realizada en 2007 y tras la reducción del mismo, la concesionaria lo sitúa por debajo del millón de euros, exactamente 966.344 euros, según los datos depositados por la compañía en el Registro Mercantil.
Para absorber las pérdidas a través del capital, PortSur ha procedido a la disminución del valor nominal de todas las acciones que integraban su capital social, pasando de 80,10 euros por acción a un valor de 19,90 euros. Sus accionistas son Global Via Infraestructuras (Caja Madrid y FCC), con el 30%, Viuda de Enrique Gimeno, con el 27,5%, Terminal Marítima de Castellón, con el 27,5% y Lubasa, con el 15%. PortSur, que tiene un activo de 41,3 millones de euros, alcanzó unas ventas de 1,84 millones de euros en 2009.
La estibadora, con una concesión de 35 años, dispone de un muelle en la dársena sur de 500 metros lineales con 16 metros de calado y una superficie operativa de 65.000 metros cuadrados. Portsur fue concebida para que Castellón pudiera recibir buques panamax, con cargamentos de hasta 80.000 toneladas de materias primas con destino a la industria azulejera de la provincia.
La terminal, con una capacidad máxima de 4 millones de toneladas, absorbió una inversión de 40 millones de euros y está tratando en 2010 de reactivar el tráfico de graneles en Castellón, tras la caída que tuvo el puerto en 2009 con la pérdida de dos millones de toneladas.