El grupo francés PSA ha advertido a los sindicatos que si no se avienen a recortar la plantilla de 2.700 personas en la planta de Sevelnord, donde ha estado construyendo los vehículos comerciales ligeros, en común con Fiat, y a congelar sus salarios, es posible que opte por cerrar esas instalaciones en el marco de un programa de reducción de capacidad productiva en Europa, acometido desde que se anunció la entrada de GM en su capital y el establecimiento de una alianza con este constructor estadounidense, embarcado, a su vez, en una reorganización de sus factorías europeas.
vehículos |