Diseña un plan alternativo provisional para conectar la futura terminal ferroviaria del muelle Prat con la red general, ante el enésimo retraso de Fomento en hacer las obras.
El puerto de Barcelona multiplicará casi por tres su red ferroviaria interna y por dos las estaciones, con lo que tendrá capacidad para 180 trenes diarios, frente a los 60 semanales actuales. El desarrollo completo de este plan ferroviario depende de los nuevos accesos, a cargo del Ministerio de Fomento, que siguen sumando retrasos
El puerto de Barcelona pasará de los 35 kilómetros actuales de red ferroviaria interna a 90 kilómetros, 65 de ellos en ancho mixto, ibérico e internacional (UIC). Y de las actuales seis terminales ferroviarias a doce. Con todo ello desarrollado, la instalación tendrá capacidad para recibir y expedir 180 convoyes al día, mientras que ahora circulan unos 60 trenes a la semana.
La Autoridad Portuaria, que preside Sixte Cambra, ha iniciado parte de las obras, aunque otras seguirán exclusivamente en proyecto, como la macro terminal en la ZAL Prat, al ser inviables hasta que no esté hecho el nuevo acceso ferroviario (acceso Llobregat en el mapa), actuación que depende del Ministerio de Fomento y que ha sufrido el enésimo retraso.
Obra iniciada y concluida son los primeros cinco kilómetros en ancho mixto en el interior de la dársena, que llegaron al muelle Sur, donde se ubica la terminal de TCB, y están operativos desde principios de año. Próximamente, el muelle Príncipe de España, donde actualmente está instalada Tercat, se sumará a la conexión en ancho internacional. Ambas actuaciones suponen una inversión de 8,1 millones de euros, por parte del puerto, y la adaptación completa al ancho UIC de la red ferroviaria interna está presupuestada en 385,1 millones. Otra actuación prevista y que no necesita los nuevos accesos es la ampliación de la terminal ferroviaria pública, que gestiona TCB, del muelle Sur.
Esta estación cuenta con cuatro vías en ancho ibérico de 450 metros y la de ancho mixto recién inaugurada de 538 metros. Se hará una segunda vía en ancho mixto y se ampliarán todas hasta los 750 metros de longitud. Además, se juntarán las cabeceras de las vías. Con esta actuación, los trenes tendrán espacio para dar la vuelta y evitar la doble tracción necesaria ahora, “lo que supondrá un importante ahorro de costes y tiempo”, señalaron fuentes de la Autoridad Portuaria.
Esta intervención está prevista para 2013, “aunque intentaremos adelantarla a 2012”. En la terminal ferroviaria del muelle Príncipe de España, que tiene una vía en ancho ibérico, otra en métrico y la inminente en mixto, no se prevén más actuaciones “hasta que se definan los usos futuros que va a tener la concesión ocupada ahora por Tercat”.
Los nuevos accesos, sin fecha
Los nuevos accesos terrestres al puerto siguen acumulando retrasos. Elministro Blanco señaló el pasado año que “había la voluntad” para incluir la licitación en el Plan Extraordinario de Infraestructuras de 2011, pero el Ministerio de Fomento sigue sin fijar fecha. Tercat empezará a operar en el nuevo muelle Prat en 2012 y también estará lista la terminal ferroviaria pública ubicada en el mismo.
Esta estación debería estar conectada con la red general mediante los nuevos accesos ferroviarios. Como estaba cantado que no iban a estar, el puerto ha diseñado un plan alternativo provisional, que consiste en conectar la futura terminal con el actual acceso en ancho ibérico de la calle 4. “Es una solución francamente mejorable, peromenos es nada”. Se podrían producir “problemas de congestión”, alertan desde el puerto.